El ultramarinos de Huesca que llegó a ser portada del 'The New York Times'
Considerado el colmado más antiguo de España.

Los colmados o tiendas de ultramarinos han sido, a lo largo de la historia, mucho más que simples lugares de comercio. Han sido espacios de encuentro, de intercambio cultural y social, convirtiéndose en puntos clave de la vida cotidiana. En el corazón de Huesca se haya un pequeño rincón que encapsula esta esencia a la perfección: La Confianza, la tienda de ultramarinos más antiguos de España, y la quinta de Europa.
Con más de 150 años de tradición, el establecimiento se ha convertido en un símbolo vivo de la historia comercial de España, conservando el mismo encanto que tenía el día de su apertura. Esta entrañable tienda ubicada en la Plaza López Allué fue nombrada Patrimonio Histórico Comercial de la Humanidad y hoy cuenta con una gran variedad de productos originales de Huesca, entre los que destacan los dulces, chocolates, quesos o vinos.
La Confianza abrió sus puertas en 1871, cuando un comerciante de origen francés llamado Hilario Wallier apostó por un negocio capaz de ofrecer productos de mercería, sedería, abalorios, encajes y porcelanas. Sin embargo, con el cambio de dueños, este local amplió la oferta y comenzó a vender productos lujosos de importación como aromáticos cafés, chocolates, licores y ahumados.
El salto internacional
Ahora este colmado vende todo tipo de artículos y sigue manteniendo la esencia que tenía a principios de su historia comercial, con mostradores y parte del mobiliario que datan del siglo XIX. Además, el techo tiene pinturas al fresco dedicadas al comercio de ultramar, todas ellas firmadas por León Abadías, un popular pintor oscense. Eso sí, a los mandos ahora se encuentra María Jesús San Vicente, quien ha sabido mantener vivo el legado de la tienda durante tantos años.
La historia de La Confianza ha traspasado fronteras, llegando a ser portada del prestigioso ‘The New York Times’ en el año 2012. El artículo destacó la autenticidad de este establecimiento, su resistencia frente a los cambios económicos y sociales, y el cuidado con el que su propietaria mantiene viva la tradición. También resaltó como este colmado sigue siendo un punto de encuentro para la comunidad oscense, más allá de su función comercial.
Por si fuera poco, este establecimiento también esconde una bodega en la que se pueden hacer recepciones. Se encuentra debajo de la propia tienda y allí los clientes se pueden deleitar con ricos platos locales y la mejor selección de cavas de licores nacionales y franceses. Por todo ello, este lugar no solo es un símbolo de Huesca, sino también se consolida como una inspiración para quienes buscan preservar la autenticidad en un mundo en constante cambio.
Su presencia en el ‘The New York Times’ no solo celebró su singularidad y logró el reconocimiento a nivel internacional, sino que también situó a Huesca en el mapa como un destino lleno de historia y de encanto. Por ello, si visitas la provincia no puedes irte sin antes pasarte por el colmado más antiguo de España, en el que te sentirás transportado a un tiempo donde cada detalle contaba una historia.