La localidad malagueña de Fuengirola fue escenario este domingo de un trágico suceso. Ese día, dos ciudadanos escoceses fueron asesinados en lo que se investiga como un enfrentamiento entre bandas procedentes del país británico.

De acuerdo con los primeros datos de la investigación, los fallecidos son Ross Monaghan y Eddie Lyons Jr., que fueron asesinados a tiros, añade la BBC, tras un asalto ocurrido en el Bar Monaghans de Fuengirola. 

El problema que denuncia el medio público británico es que apenas dos días después "no hay señales de la policía española, salvo algún que otro coche patrulla que pasa por allí".

"En el país de origen de los dos hombres que fueron asesinados a tiros, el caso sería clasificado como un homicidio de "categoría A" de alto nivel y el bar permanecería sellado y patas arriba durante días", denuncia el artículo de la BBC.

En contraste, detalla que el local se encuentra "sin cordón, sin cinta, sin forenses con trajes blancos, sin ningún oficial custodiando la puerta principal".

Sobre el doble crimen, el medio explica que se especula con que estén relacionados con la actual disputa entre bandas en el centro de Escocia, que ha dado lugar a docenas de incidentes, incluidos presuntos intentos de asesinato, y decenas de detenciones.

Algunas de las personas que fueron blanco de la violencia están vinculadas al grupo criminal Daniels, rivales desde hace mucho tiempo de otro importante grupo del crimen organizado, la familia Lyons, del cual eran miembros Eddie Lyons Jr. y Ross Monaghan, añade el citado artículo.

No obstante, estos asesinatos representarían una escalada masiva en el nivel de violencia en comparación con lo que ha ocurrido antes, ya que un caso así, en un bar del extranjero, no tiene precedentes en la problemática actual.

La publicación reconoce que la alcaldesa de Fuengirola, Ana Mula, ha aseverado que la policía necesita más recursos para hacer frente a los tiroteos y la amenaza general del crimen organizado relacionado con las drogas.