"El barco no va a hundirse"
Dicen en Moncloa que las cuentas públicas va a salir, y eso da un tiempo muy valioso a Sánchez para que el Consejo de Ministros se ponga a funcionar a pleno rendimiento.
Con la trama Koldo y sus derivadas como telón de fondo, Pedro Sánchez cede una vez más ante Junts para aprobar la ley de amnistía. Su hemeroteca de hace tan solo unos días vuelve a quedar en papel mojado: habrá modificaciones en la ley que afectarán a los delitos de terrorismo y alta traición. Exactamente lo que Sánchez dijo que no se tocaría.
El presidente del Gobierno cede un momento de enorme debilidad política, con un objetivo claro: ganar tiempo y que la legislatura siga adelante. Tras la ley de amnistía, llega la negociación y posterior aprobación de los Presupuestos Generales del Estado.
Dicen en Moncloa que las cuentas públicas va a salir, y eso da un tiempo muy valioso a Pedro Sánchez para que el Consejo de Ministros se ponga a funcionar a pleno rendimiento. "El barco no va a hundirse", dicen el Partido Socialista. Ahora, más que nunca - añaden las fuentes consultada - toca aplicar el manual de resistencia.
Los ánimos de puertas para adentro en el PSOE siguen muy bajos y algunas estructuras territoriales cada vez marcan más distancias con el jefe del Gobierno. Ahí está, por ejemplo, la votación en Extremadura. Miguel Ángel Gallardo ganó las primarias regionales a Lara Garlito, las aspirante que contaba con el aval de Sánchez.
