Reserva para una comunión en octubre y quiere cancelar ahora: la reacción del restaurante, controvertida
Todas las reacciones pueden tener sentido.

Las comuniones se han convertido en las nuevas bodas. Los padres de muchos niños han decidido tirar la casa por la ventana en eventos que cada vez tienen menos elementos religiosos y más actividades para las redes sociales.
En X (antes Twitter) la cuenta Soy Camarero ha compartido que una familia le ha pedido consejo porque un restaurante no quiere devolver la fianza por la reserva a una familia que reservó en octubre y que ha avisado ahora, en enero. Es decir, con cuatro meses de margen para conseguir otra reserva.
"Quería hacerte una consulta, en octubre nosotros reservamos en un restaurante para la comunión de nuestro hijo que es en mayo y al llamarle hoy para anular la reserva ya que al final no podemos celebrarlo, el dueño me dice que no nos devuelve la fianza, que si hacemos una celebración nos lo descuenta pero que no nos lo devuelve", ha empezado diciendo.
Y prosigue: "En ningún momento nos informó de eso cuando hicimos la reserva ni hay ningún contrato ni papel firmado con esa información. Me gustaría saber si eso es legal o que podemos hacer".
Un hostelero ha dicho: "La época de comuniones son solo 5-6 fines de semana. El local se compromete a darte el espacio a ti y no a otros, por eso pide una señal. Si les dejas colgado y ya no pueden llenarlo, es un perjuicio para el local. Yo les diría: si me traéis un evento de reemplazo, os lo devuelvo".
Y otra persona, cuya opinión está bastante extendida en las respuestas, dice: "Creo que cuatro meses es tiempo suficiente para llenar un hueco, tampoco creo que haya comprado el género o contratado personal. De haber devuelto la fianza incluso podría pedirle colaboración porque seguro que en la clase de su hijo hay interesados... Un poco duro el dueño, ¿no?".