Le intentan multar por limpiar mobiliario urbano, pero el final rompe todas las expectativas

Le intentan multar por limpiar mobiliario urbano, pero el final rompe todas las expectativas

"¿Valoramos la diferencia entre un acto vandálico y un bien a la sociedad?".

Publicación de TikTok de @laboncler

La historia de Juan Carlos ha generado muchas expectativas. De un gesto de buena fe casi sale multado, pero una señora fue su ángel de la guardia y, además, el finao es ciértamente cómico por el comentario que hizo el que es encargado de la cuenta de @laboncler, "el producto de limpieza revolucionario del que todo mundo habla".

"Hoy casi me llevo una multa por limpiar mobiliario urbano, ¿cómo te quedas? ¿Valoramos la diferencia entre un acto vandálico y un bien a la sociedad?", ha expresado al inicio dle vídeo, que cuenta con casi cuatro millones de visualizaciones y casi 300.000 'me gusta' en poco más de unos días.

Desde hace meses lleva viendo unas figuras de bronce que ha dicho que están "prácticamente abandonadas a su suerte" en Molina de Segura (Murcia). Mientras limpiaba, un coche oficial de policía estacionó, aún sin bajarse del coche, observando lo que hacía. "Como todo mobiliario urbano, constitucionalmente está para uso y disfrute de sus ciudadanos, lo considero mío", ha expresado.

Acabada su obra, una señora se le acerca para darle las gracias por su labor, hasta que se acerca la pareja policial a preguntar si todo estaba bien. Explicado que solo estaba fecilicitándolo, insisten en que no puede limpiarlo y que será multado. 

La señora, una heroína de pies a cabeza, insistió en que no estaba haciendo nada malo. "Anoche entrarona  robar a mi casa y me llevé un susto de muerte, dense una vuelta por la urbanización y cumplan con su trabajo", les dijo.

Además, siguió insistiendo en defender a Juan Carlos: "Deberían darle las gracias porque esto no es tarea suya, ¿qué tiene de malo esto?". Pero él, pálido, estaba asustado de la sanción económica, hasta que el policía se interesó en el producto con el que limpió la estatua.

Infiltrados
Un proyecto de Ikea

Su respuesta fue cómica, pero firme: "Por supuesto que sí, son 15,95, y discúlpame por cometer otro delito, pues no tengo permisos para la venta ambulante". Se libró de la multa: "¡Vata tela!".