Cinco motivos para que las empresas regalen cestas de Navidad a sus empleados

Cinco motivos para que las empresas regalen cestas de Navidad a sus empleados

Es imposible entender estas fiestas sin estos regalos que tanto alegran las mesas de los españoles.

EL HUFFPOST

Las cestas de Navidad de las empresas forman parte del paisaje festivo que caracteriza a estas entrañables fiestas en España desde el siglo XIX. Cada año son millones los hogares que disfrutan de las viandas que integran estos lotes. Lo que inicialmente fue una costumbre adquirida por las administraciones públicas se fue extendiendo al ámbito de las empresas privadas a lo largo del siglo XX y, actualmente, en pleno siglo XXI, es imposible entender las navidades sin estas suntuosas cestas que tanto alegran las mesas de los españoles.

Con una gran variedad de contenidos y de precios (pueden encontrarse lotes desde apenas 10 euros hasta algunos que rondan los 1.000 euros, e incluso más), la tradición empresarial de regalar cestas de Navidad a sus empleados está especialmente arraigada en España, aunque también existe en otros países. Así, en Italia es costumbre regalar lotes con pandoros, panettones y licores, mientras que en el Reino Unido la tradición también se remonta al siglo XIX, aunque no fue hasta la IGM cuando alcanzó la gran popularidad que aún mantiene.

El factor humano es el más importante a la hora de regalar cestas de Navidad a los empleados, aunque no es el único. También son reseñables las ventajas prácticas que supone regalar estos lotes navideños a los empleados por parte de las empresas.

 

La plantilla de una empresa se asemeja a la tripulación de un barco. Todos sus integrantes, desde los de menor hasta los de mayor responsabilidad, unen sus esfuerzos para sortear las inevitables tormentas y conducir la nave a buen puerto. Las cestas de Navidad simbolizan el espíritu de unidad y potencian la sensación de pertenecer a un mismo grupo con unos mismos objetivos.

¿Por qué cestas de Navidad y no otros regalos de diferente índole? Es sencillo. Cada persona es un mundo y los gustos personales son de lo más variados. Sin embargo, hay algo que une a prácticamente todos durante las fiestas navideñas: las comidas y cenas en familia. Por este motivo los lotes de Navidad son regalos infalibles que entusiasman a todo el mundo.

Veamos de una forma más pormenorizada las razones por las que ninguna empresa puede dejar de obsequiar a sus empleados con estas tradicionales cestas. 

1. Fortalecen la relación de los trabajadores con la empresa

Un trabajado puede pasar alrededor de 2.000 horas al año trabajando en su empresa (y esto sin contar con las horas extras y las tareas que hay que llevar a casa).

Este esfuerzo significa muchas veces sacrificar tiempo con la familia y los seres queridos. Regalar una buena cesta de Navidad supone reconocer el trabajo de los empleados y el aprecio que la empresa siente por ellos.

2. Son perfectas para compartir con la familia

Junto a las vacaciones veraniegas, las navidades son las fechas del año en las que más tiempo se comparte con la familia, contando además con ese plus entrañable que caracteriza estas fiestas. Las cena de Nochebuena, la comida de Navidad, las uvas de Nochevieja, los brindis por el Año Nuevo...

Todo gira alrededor de la mesa y eso es precisamente lo que brindan estos lotes de regalos: jamones y embutidos, quesos, vinos, cavas, turrones...

3. Mejoran la productividad

La confianza y lealtad que generan las cestas de Navidad en los empleados, el hecho de sentirse apreciados y valorados, incide de forma muy positiva en su productividad.

Regalar lotes de Navidad aumenta la motivación de los empleados y reducen la fluctuación, independientemente de su posición en el organigrama de la empresa o de su salario. Todos agradecen por igual estos tradicionales obsequios.

4. Suponen una deducción de impuestos

Regalar cestas de Navidad no solo aumentan la motivación y la lealtad de los empleados, a nivel fiscal también pueden suponer un ahorro a nivel fiscal.

Las facturas de este tipo de lotes son deducibles del Impuesto de Sociedades en el segundo año tras su adquisición. En el caso de que las cestas tengan un valor superior a los 90,15 euros también es posible deducir el IVA.

5.Gran variedad de contenidos y precios

Existe la falsa creencia entre ciertos sectores de la población de que las cestas de Navidad son un obsequio que solo está al alcance de las grandes corporaciones. Nada más lejos de la realidad. Cada vez son más las PYMES que regalan estos lotes navideños a sus empleados.

Lógicamente, la capacidad económica de estas pequeñas y medianas empresas no suele estar a la altura de las grandes multinacionales pero eso no supone ningún problema a la hora de obsequiar a sus empleados.

El rango de precios de una cesta de Navidad va desde los 10 euros hasta donde alcance el presupuesto. Además, son tan personalizables que pueden encargarse lotes especiales para veganos, vegetarianos, celíacos, abstemios, etc.

 

Desde hace más de 40 años la empresa valenciana Sadival es un referente en la fabricación y distribución de cestas de Navidad en España, siendo desde la introducción de internet en nuestras vidas la compañía líder indiscutible en la venta online de estos lotes de regalos navideños. Su incomparable prestigio en el sector está avalado por los casi 10.000 clientes que confían en sus servicios y en el más de medio millón de pedidos que atienden cada Navidad.

Sadival únicamente trabaja con primeras marcas y su relación calidad-precio es inigualable, además de realizar la distribución de sus lotes por medio de las más importantes y eficientes empresas de transporte del país.

Son muchas las razones para regalar cestas de Navidad a los empleados, tanto por el bien de los mismos como por el de la propia empresa. Es indiferente el sector, el número de trabajadores con el que se cuente o la capacidad económica de la compañía. Siempre es posible tener ese pequeño detalle que tanta alegría puede llevar a los hogares y que tan positivamente revertirá en el ambiente y la productividad laboral.