Fracaso de Rusia con un barco recién estrenado

Fracaso de Rusia con un barco recién estrenado

El Centro de Comunicación Estratégica del ejército ucraniano confirmó las informaciones sobre los daños causados al barco portamisiles ruso Askold. 

Buques de carga y transbordadores de automóviles cruzan el estrecho de Kerch, en Crimea.Anadolu Agency via Getty Images

El Ministerio de Defensa de Reino Unido ha comunicado este martes que, según informaron fuentes ucranianas y rusas, el 4 de noviembre de 2023, es "casi seguro" que una corbeta naval rusa recién construida resultara dañada durante un ataque ucraniano mientras estaba atracada en el astillero Zaliv en Kerch, en la Crimea ocupada.

"El Askold clase Karakurt, botado en 2021, no había sido encargado en la Armada rusa. El incidente se produjo más al este, en Crimea, donde se han producido la mayoría de los anteriores ataques de largo alcance reivindicados por Ucrania", han remarcado. 

Además, han agregado que "la capacidad de Ucrania para atacar la infraestructura de construcción naval de Crimea probablemente hará que Rusia considere trasladarse más lejos de la línea del frente, retrasando la entrega de nuevos buques", según han añadido en su informe, publicado en su cuenta de X.

El Centro de Comunicación Estratégica del ejército ucraniano confirmó este lunes las informaciones obtenidas esta semana por especialistas que analizan imágenes de satélite sobre los daños causados al barco portamisiles ruso Askold durante un ataque ucraniano del fin de semana contra un astillero.

Según el Centro de Comunicación Estratégica ucraniano, el Askold sufrió “daños significativos” que podrían hacer imposible repararlo. “¡Confirmado! El portamisiles ruso Askold”, se lee en una nota oficial ucraniana, “sufrió daños como resultado del ataque a la infraestructura naval y portuaria de la planta Zaliv, en la Crimea temporalmente ocupada (por los rusos)”.

El astillero de Zaliv está situado en el extremo oriental de la península ucraniana de Crimea, ocupada por Rusia desde 2014. Ucrania había centrado hasta ahora sus ataques en la parte occidental de la península, obligando a Rusia a replegar sus buques de guerra hacia el este.

El de Kerch supone un nuevo salto cualitativo en la campaña ucraniana de ataques en el Mar Negro. “Las Fuerzas Armadas de Ucrania repiten que Crimea es Ucrania. Y que los rusos no podrán esconderse en ningún lugar (de la península)”, dice el comunicado de Kiev.

Según el ejército ucraniano, el Askold era el barco más nuevo del proyecto Karakurt, en el marco del que Rusia construyó una serie de corbetas portamisiles equipadas con tecnología que dificultaban su detección por radar.