El PP busca recuperar el control de la calle con su convocatoria en las plazas contra la amnistía

El PP busca recuperar el control de la calle con su convocatoria en las plazas contra la amnistía

Los populares evitarán la foto con Vox en las capitales de provincia, pero la ultraderecha se ha sumado a las protestas auspiciadas por los de Feijóo.

​- Manifestación del PP contra la amnistía en directo hoy domingo 12 de noviembre

Feijóo saluda durante el acto del PP contra la amnistía celebrado en Valencia.Europa Press via Getty Images

La amnistía y los pactos de Pedro Sánchez con los independentistas catalanes eran una oportunidad de oro brindada al PP para tensionar a su electorado convocándole a manifestarse en las calles. 

El líder de los populares, Alberto Núñez Feijóo, y su dirección prepararon actos casi semanales en distintas ciudades del país en respuesta a lo que consideran cesiones del socialismo al independentismo. Primero fue Madrid, donde se reunieron unas 40.000 personas en pleno barrio de Salamanca, uno de los distritos más adinerados de la capital. Después, le siguieron otras ciudades como Málaga o Valencia, también con importante afluencia de manifestantes. 

Parecía que era el PP el que monopolizaba la protesta callejera hasta que el pasado viernes, convocados a través de grupos de Telegram ligados a la ultraderecha, centenares de personas decidieron plantarse ante la sede del PSOE en la calle Ferraz

Un día tras otro, las manifestaciones se fueron sucediendo y en ellas el tono de los cánticos, los lemas y las pancartas no eran, precisamente, los que quería enarbolar el PP. Más bien, se ajustaban más al tono exhibido por Vox o, quizás, por los sectores más extremos del propio partido de Feijóo. 

Por ahí asomó la cabeza Esperanza Aguirre, expresidenta de la Comunidad de Madrid, para pasmo de Génova y de algunos dirigentes territoriales, que consideraron un tremendo error su presencia en las marchas, en las que, incluso, llegó a intentar cortar el tráfico. 

Con la tensión disparada en los últimos días, en los que se han producido cargas policiales y detenciones, en un clima de violencia y exaltación del fascismo; el PP ha tenido que desmarcarse políticamente, llegando a condenar los hechos acaecidos frente a la sede del PP. 

El debate en el seno del partido ha estado muy presente en los últimos días, entre quienes consideran que el PP sólo debe apoyar las concentraciones comunicadas, y quienes creen que deberían respaldarse todas las manifestaciones contra la amnistía, aunque condenando, obviamente, la violencia. 

Un debate que incluso se trasladó a las redes cuando la propia Aguirre contestó a unas declaraciones de María Guardiola, presidenta de Extremadura, que pedía manifestarse sólo en concentraciones debidamente comunicadas. "Que le quiten el Twitter", llegaron a pedir desde esta región tras lo sucedido. 

Con este marco, Génova quiso dar un paso al frente y el lunes, Feijóo convocó a todos los españoles a manifestarse este domingo 12 de noviembre, al mediodía, las plazas de todas las capitales de provincia. (Pincha aquí para ver los lugares).

Con esta iniciativa, el PP busca recuperar el control de la calle, algo que han venido reclamando sectores del partido en las últimas jornadas, como ya ha contado este diario"No se le puede dejar la calle a Vox", argumentan. 

Pero el riesgo sigue estando allí, porque el partido de extrema derecha presidido por Santiago Abascal ya ha anunciado que acudirá a la convocatoria del PP. Aun así, los populares han descartado en las últimas horas que vaya a haber una foto con la ultraderecha. Ni con Ciudadanos, que también estará allí. Se buscará evitar, por enésima vez, una 'foto de Colón'

El PP quiere liderar la "reacción firme y serena del pueblo español al ataque que sufre nuestra Carta Magna, la división de poderes y las bases mismas de nuestra democracia", tal como reza el manifiesto con el que animan los populares a manifestarse este domingo. 

Una reacción "pacífica, cívica y legítima" para la que el PP reclama unidad a los demócratas, en un claro llamamiento a aquellos socialistas —Cuca Gamarra, 'número dos del partido, no dudó en señalar este viernes a García Page, presidente socialista de Castilla-La Mancha—: "Estamos juntos, pese a que quieren dividirnos. Estamos ante un desafío a nuestra democracia que requiere la reacción de los demócratas, sin distinción de ideología".

"No nos ponemos de rodillas ante los que odian la democracia. Tampoco nos vamos lejos, sino que salimos a las calles y plazas de nuestra nación, orgullosos de nuestra democracia, orgullosos de nuestros jueces, de nuestros policías, de nuestros ciudadanos, de nuestra Constitución. Orgullosos de España", prosigue el documento, que concluye con un exclamado "¡España no se rinde!".

La concentración también servirá para volver a jerarquizar la acción del partido, puesta en duda una vez más por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, esta semana. 

La dirigente madrileña se adelantó a su líder nacional y convocó a los medios a una declaración en reacción al pacto del PSOE con Junts. En el PP esto no se entendió, y fuentes del partido reconocen a este diario que falló la coordinación. "Los barones hablando antes que Feijoo, con mensajes distintos… esto también es culpa de Génova que tiene que coordinar el mensaje". 

Además, hubo quejas por las hipérboles que usó Ayuso, que llegó a hablar de "dictadura". "Se ha pasado de frenada. En la hipérbole nos perdemos; no es necesario. La cosa es lo suficientemente grave. El protagonismo permanente de Ayuso no es necesario", afirma un líder regional. 

Feijóo busca este domingo recuperar el control, tanto dentro como fuera de su partido. El líder del PP se juega reafirmar su papel como líder de la oposición, toda vez que la investidura de Pedro Sánchez parece encarrilada y que España se dirige a un nuevo Gobierno de coalición progresista. Y ese camino lo empezará, como dijo Milanés, pisando las calles nuevamente. 

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Jefe de Política de El HuffPost