La crisis de Doñana se enquista: Ribera suspende la reunión con alcaldes de la zona tras la nueva polémica de la Junta

La cuestión de Doñana se enquista pese a las buenas palabras de meses atrás.  La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha suspendido las reuniones del martes con alcaldes, equipos técnicos y organizaciones a raíz de la última polémica por la supuesta declaración de suelos forestales como cultivables en el decreto de simplificación administrativa de la Junta de Andalucía.

Ribera ha adelantado esta decisión tras reunirse con el presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, y la hará oficial una vez hable con el líder andaluz, Juanma Moreno, a lo largo de la tarde. En la jornada de reuniones estaba previsto que el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, se viera con responsables y expertos locales.

Estas sesiones formaban parte del acuerdo alcanzado entre Gobierno central y Junta allá por noviembre. Sin embargo, las medidas incluidas en el reciente decreto de simplificación ha llevado a Moncloa a rechazar su participación. "No sé qué tengo delante, no sé qué efecto tiene esa legalización retroactiva", ha manifestado la vicepresidenta tercera y titular para la Transición Ecológica.

La que sigue en el aire, entre muchas dudas, es la cita entre Ribera y Moreno, prevista para este jueves en el Palacio de San Telmo de Sevilla, y que debía de servir de análisis de lo hablado en los múltiples encuentros programados inicialmente para el martes.

La polémica ha surgido tras la denuncia del PSOE-A de que el Gobierno andaluz ha recuperado, a través del decreto-ley de simplificación administrativa, la iniciativa de declarar como cultivables suelos forestales en la Corona Norte de Doñana, una medida que contemplaba la polémica proposición de ley descartada tras el acuerdo alcanzado entre la Junta y el Gobierno.

El Gobierno andaluz ha dicho que es "rotundamente falso" que quiera recuperar esa proposición de ley en este decreto y ha defendido que se limita a adaptar la ley forestal andaluza a la estatal y que "en ningún momento se habla de regadíos ni de Doñana".

Sin embargo, la ministra ha admitido que le preocupa lo que ha visto y que se lo ha "encontrado" publicado en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía "por sorpresa". Ha explicado que en el Gobierno no tenían "ni idea" de que se estuviera haciendo una modificación de ese tipo, por lo que hay que tomarlo "con mucha cautela".

"Quiero entender qué es lo que ha ocurrido. No me siento en condiciones de saber qué es lo que tenemos delante y lo lamento profundamente", ha asegurado la ministra. El asunto queda pendiente de un análisis por parte de los servicios jurídicos del Ministerio, pero la ministra ha espetado que está "sorprendida" por habérselo "encontrado" así, "sin haber podido intercambiar opiniones".

Ha añadido que es "muy difícil" trabajar para reducir las presiones sobre Doñana, dedicar un volumen de recursos "muy notable", buscar consenso con todos los implicados y encontrarse, que "frente" a eso, "de un día para otro se produce una legalización retroactiva de usos agrarios en suelo forestal".