La playa más famosa de España multa con 750€ a los que jueguen a las palas en zonas de baño

La playa más famosa de España multa con 750€ a los que jueguen a las palas en zonas de baño

La restricción se limita a la práctica en el agua con el objetivo de mantenerla limpia. 

Un turista británico en Benidorm.Getty Images

Las altas temperaturas de estos días, las fechas y el cansancio tras meses de trabajo sin descanso invitan estos días a coger las maletas y hacer una escapada hacia la costa. Sin embargo, hay ciertas cosas que hay que tener en cuenta en la playa, porque no todo está permitido. 

Hay cosas evidentes, como hacer una barbacoa o el consumo de alcohol en la arena que pueden acarrear una multa, pero también hay otro tipo de actividades por las que la Policía puede sancionar que, en general, no se tienen tan claras. 

De hecho, en algunas playas está incluido en esta lista uno de los deportes más populares en las playas de España: las palas. Este juego, similar al tenis, puede acarrear multas de hasta 750 euros si las autoridades te pillan practicándolo en una playa española, aunque no en todas las zonas.

El objetivo: mantener limpia el agua

La Comunidad Valenciana, en la costa del mediterráneo, es uno de los lugares predilectos para disfrutar de unos días de playa. Dentro de esta zona, Benidorm es una de las más populares entre nacionales y extranjeros. Y es en esta playa donde no se puede jugar a las palas, al menos dentro del agua. 

Las autoridades locales decidieron hace unos años establecer dicha restricción con el fin de mantener limpia el agua, según ha publicado Vozpópuli. Para ello, establecieron unas multas que como máximo son de 750 euros. Sin embargo, sí es muy habitual ver jugar a la gente en la arena, lo que sí está permitido. El ayuntamiento de Benidorm permite la práctica de este deporte en la orilla y dentro del agua siempre y cuando no se moleste a los bañistas o las dimensiones de la playa sean los suficientemente grandes. En caso de no respetar estas leyes, es posible ser multado.

En la mayoría de las playas españolas hay otras restricciones más comunes, como la prohibición de utilizar jabón y champú en las duchas públicas. Esta medida se estableció para que no se excedieran a la hora de quitarse la sal del mar. Además, acampar en la playa implica una multa que ronda los 1.500 euros.