La gran noche de Pau Gasol: su número '16' entra de lleno en el olimpo de Los Angeles Lakers

La gran noche de Pau Gasol: su número '16' entra de lleno en el olimpo de Los Angeles Lakers

La franquicia angelina, donde consiguió dos anillos, retira su camiseta en el partido contra los Memphis Grizzlies.

Pau Gasol, celebrando una jugada.Getty Images

La historia del deporte español está repleta de páginas doradas y conquistas superlativas, pero la de este martes es, sin duda alguna, una de esas que serán recordadas para siempre. Los Angeles Lakers, la franquicia más grande la NBA y la más laureada junto a los Boston Celtics con 17 anillos de campeón, va a retirar antes del partido contra los Memphis Grizzlies la camiseta de Pau Gasol.

Su ya eterno dorsal 16 colgará del techo del Crypto.com America (el Staples Center de siempre) junto a los números que vistieron otras leyendas angelinas como Wilt Chamberlain (13), Elgin Baylor (22), Gail Goodrich (25), Magic Johnson (32), Kareem Abdul-Jabbar (33), Shaquille O'Neal (34), James Worthy (42), Jerry West (44), Jamaal Wilkes (52), George Mikan (99) y su amigo Kobe Bryant (8 y 24).

El escenario, además, no ha podido ser más idílico, ya que los Lakers se enfrentan a los Memphis Grizzlies, la franquicia que confió en él en la noche del draft del 2001 (fue seleccionado por los Atlanta Hawks con el número 3, pero traspasado al momento al equipo del estado de Tennessee).

Ahí Pau comenzó a forjar su leyenda en el baloncesto americano y a dominar los aros rivales. Su nivel excelso hizo que en febrero del 2008 los Lakers decidieran apostar por él como el escudero de gala de un Bryant imparable. Creían que era la pieza correcta para dejar atrás la sequía del último lustro y volver a ganar la NBA. Y acertaron.

Durante las siete temporadas que Gasol estuvo en California, hasta junio del 2014, ganó dos anillos (en los cursos 2008/09 y 2009/10) y perdió una final contra los Celtics en ese primer medio año que estuvo. Además, se hizo un fijo en el partido de las estrellas al ser tres veces All Star.

Él y Kobe formaron una de las parejas más dominante de toda la NBA. De hecho, entre las principales conquistas de Gasol una está en ser "el mejor compañero que ha tenido un tal Kobe Bryant", tal y como asegura David Sardinero, director de la revista Gigantes. "Esto tiene un mérito enorme. No es tanto el valor estadístico individual, si no haber dado la mejor ayuda posible a uno de los mejores de la historia", sentencia.

Por ello, no duda en definir lo que va a ocurrir esta noche en Los Ángeles como uno de los días más bonitos para el baloncesto español y para la historia de nuestro deporte. 

"Es el galardón más grande que ha recibido un jugador español"

La generación de oro del baloncesto español se despidió para siempre de los tableros en los pasados Juegos Olímpicos. Ahí Pau Gasol decidió poner punto y final a su trayectoria en la Selección y escasos meses después dijo adiós al baloncesto, pero el capítulo de esta noche es la guinda a más de dos décadas de éxitos. El postre soñado y más inimaginable.

"A nivel individual creo que es el galardón que ha recibido un jugador español en la historia de nuestro baloncesto, sin duda. A nivel colectivo es diferente, pero para mí el mérito es que no sé si lo volveremos a ver y, si lo volvemos a ver, será el segundo y no el primero", afirma el director de la revista Gigantes.

De hecho, Sardinero no se complica a la hora de tratar de justificarse y lo simplifica todo en una frase: "La forma más fácil de explicarlo es decir 'mira la foto de jugadores con el número retirado, ve esos nombres y entiende que a partir de hoy Pau Gasol está con esos'".

Además, señala la relevancia que da el hecho de que sea en Los Angeles Lakers y no en cualquier otra. "Que tenga ese gesto contigo un equipo planetario por el que han pasado los mejores... A nivel individual se me ocurren muy pocos galardones mayores, es un premio a una trayectoria y una relevancia única y tiene un significado especial".

En cuanto a los logros del deporte español también lo coloca entre uno de los principios: "Para mí es mucho más que ganar un Grand Slam, un Tour, etc. Este premio mezcla lo individual, porque es un reconocimiento individual, que se hace dentro de un equipo, que además es legendario. Tiene esa doble vertiente y como mínimo está al nivel de cualquier logro individual que haya podido haber en el deporte español".

  Pau levantando el trofeo de campeón tras ganar a los Boston Celtics.Getty Images

La historia ha querido ser tan redonda que sobre la pista del Crypto.com Arena no solo estará Pau, si no que también estará Santi Aldama, jugador de los Memphis y una de las esperanzas de nuestro baloncesto. "Tiene un punto simbólico muy bonito que en un día como el de hoy pueda haber otro jugador español presenciando esto desde el parqué", dice Sardinero.

En las gradas acompañarán a Gasol sus inseparables compañeros y amigos José Manuel Calderón, Raúl López, Juan Carlos Navarro y Felipe Reyes porque, los éxitos de Pau, no se entienden sin esa generación dorada que derribó todos los muros desde las categorías inferiores. 

El 1 de febrero del 2008, el día que todo cambió

Con el objetivo de juntar a Kobe Bryant con un segundo espada que les hiciera volver a ser uno de los equipos aspirantes al anillo, los Lakers apostaron por Gasol un ya inolvidable 1 de febrero del 2008. La historia es tan caprichosa que en ese traspaso con los Grizzlies se deshicieron de Kwame Brown, número 1 del draft de Pau, y de los derechos de su hermano Marc Gasol.

La apuesta no les pudo salir mejor. Sardinero incluso cree que el resultado fue mejor de lo esperado: "Pau nunca había sido una segunda espada en un equipo que aspirase al anillo y se encuentran con un jugador talento all star que está dispuesto a sacrificar parte de sus números y relevancia individual para ayudar a ganar al equipo desde el primer momento. Creo que ellos no esperaban un éxito tan inmediato".

"Fue una de esas conjunciones que se dan y funcionan. Habría mejores jugadores que él, sí, pero no habría tantos jugadores que hicieran lo que supo hacer Pau en los Lakers mejor que él", añade.

Sardinero incide en destacar la inteligencia de Gasol al darse cuenta desde el principio que su carrera iba a ser mucho mejor si aceptaba ese rol y lo amplificaba. "Al final eso es lo que pasa y él unido a un jugador histórico como Kobe Bryant convierte a los Lakers en una máquina para ganar", explica, recordando que esa forma de ser y esa mentalidad la ha tenido siempre tanto Pau como el resto de la generación de oro del baloncesto.

Aunque la trayectoria completa de Gasol está cargada de partidos memorables, quizás su nivel más alto se ve en ese 2010 donde consigue ganar su segundo anillo a los Celtics en siete partidos y vengarse de lo ocurrido en 2008.

"El haber perdido dos finales en 2008 (la de la NBA y la de los Juegos Olímpicos) despierta ese fuego competitivo que, si no hubiera ocurrido, igual habría sido diferente. Ayudo a cincelar ese carácter y esa competitividad y en esas finales se vio perfectamente", afirma el director de Gigantes. Un año antes habían barrido en las finales a los Orlando Magic del que sería su compañero, Dwight Howard.

Sin embargo, entonces la buena tendencia de esos Lakers se rompió. Al desgaste de ganar se sumaron los fichajes de Steve Nash y del propio Howard. Ese proyecto no salió bien y Pau terminó sus últimos años en California incluso pidiendo ser traspasado.

"La memoria, que es muy selectiva, ha olvidado mucho de ese periodo amargo. Como en cualquier relación, olvidamos los momentos malos, pero es verdad que hubo años oscuros, casi más que claros. Por suerte se quedó en un recuerdo regular que está ahí, pero que no ha borrado todo lo bueno que pasó y está pasando", recuerda Sardinero.

Lo que está claro es que, como acaba rematando, “el baloncesto español y todos estamos orgullosos y representados en lo que va a suceder”. 

Lo de esta noche es la guinda de nuestro E.T., como bautizó a Gasol en su día Andrés Montes.

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Alfredo Pascual es redactor de Virales en El HuffPost en Madrid. Escribe sobre noticias de televisión, política, redes sociales, deporte, etc. Estudió periodismo en la Universidad Complutense de Madrid y un máster en Periodismo de investigación, datos y visualización en la UNIR. Antes de entrar en El HuffPost estuvo en la Cadena Ser y en el Heraldo de Aragón. Puedes contactar con él en alfredo.pascual@huffpost.es