Camareras para seducir clientela

Camareras para seducir clientela

Una mujer denuncia una oferta de trabajo que buscaba chicas dispuestas a atraer clientes a través de redes sociales para ligar

María Fernández, buscando ofertas de trabajo en internet este martesMARÍA FERNÁNDEZ

María Fernández, de 22 años, acaba de terminar su carrera. Mientras busca trabajo como comunicadora persigue alternativas que le permitan llegar a fin de mes y pagar el alquiler. Todos los días entra en las decenas de aplicaciones de búsqueda de ofertas laborales para ver si hay alguna novedad. La semana pasada leyó un anuncio interesante en Job Today: “1.000-1.500 euros, jornada completa”. Acostumbrada a ver salarios que rara vez rozan los 1.000 euros, no dudó en postularse.

El puesto era de camarera en el restaurante Bi&Bi de Madrid, a escasos metros de la Plaza Mayor. Fernández fue allí para la entrevista y la recibió el dueño, que no hablaba muy bien español. Fue una de las empleadas del local la que le dio todos los detalles del trabajo: “Lo primero era descargar Tinder y Badoo”, cuenta Fernández, que estudió periodismo y se mudó a Madrid en septiembre.  

Fernández empezó a sentirse incómoda. No entendía por qué necesitaba descargarse unas aplicaciones para ligar si su trabajo, en teoría, sólo iba a consistir en servir mesas. “Debía quedar con hombres, llevarlos al sitio y obligarles a consumir mucho”, explica Fernández, que cifra en un 10% la comisión que le ofrecían por cada cita. Así era como, con un salario base cercano a los 1.000 euros, la empresa estimaba que se podían llegar a alcanzar los 1.500 mensuales. 

El objetivo era claro: hombres de más de 35 años con empleo

El objetivo era claro: hombres de más de 35 años con empleo. Una vez escogidos, no sólo debían consumir mucho, sino invitarla y que ellos corrieran con todos los gastos. “Tenía que fingir que se trataba de una cita romántica y no decir que trabajaba para el local”, denuncia Fernández, que recuerda cómo la trabajadora del local le enseñaba la sala VIP mientras le hacía la entrevista. “El restaurante desde fuera es algo normal, pero escondido entre pasillos y cortinas hay una sala oscura con sofás donde mandan a las chicas con sus citas”, relata. La idea del local es que, una vez apartadas en un rincón aislado e íntimo, las chicas pudieran agradecer su generosidad a su cita del modo que creyeran más conveniente.

Asustada, Fernández rechazó la oferta y se dirigió a la comisaría de policía más cercana para denunciar lo que le acababa de pasar. “Es denigrante que se use como reclamo a mujeres para este tipo de negocio”, se queja.

El hilo de Twitter donde contó su historia acumula ya más de 19.000 compartidos y 15.000 me gusta en menos de una semana. Tras su denuncia, la oferta aparece en estado “caducada” en el portal de empleo que lo publicó. “Aunque el perfil es visible desde nuestra página, el usuario ha sido bloqueado y no tiene acceso a esta cuenta ni lo tendrá ya nunca gracias a nuestro sistema automatizado de moderación”, afirman desde Job Today al recibir las denuncias de esta oferta laboral.  

Tras la denuncia, la oferta aparece en estado “caducada” en el portal de empleo

Esta no es la primera vez que el restaurante trata presuntamente de ‘engañar’ a mujeres con ofertas de empleo que no son lo que parecen. Fernández termina su hilo en Twitter con una llamada a la difusión. Al hacerlo, se ha encontrado con que no es la única afectada: otras mujeres llevan desde hace medio año denunciando en redes sociales a ese mismo local por los mismos hechos.

Una de ellas es Marta F., quien denuncia que durante la entrevista tuvo que soportar comentarios obscenos por parte del propietario. “Son unos sexistas y deberían cerrar ese sitio”, subraya. Otra mujer, que prefiere no dar su nombre por temor a represalias, asegura que el dueño le tocó la pierna y le hizo comentarios inapropiados sobre su cuerpo. En su oferta de trabajo pedían una azafata, no una camarera, aunque ella también se postuló al trabajo a través de la plataforma JobToday.

El propietario de Bi&Bi se niega a hacer comentarios y asegura que sus abogados se están encargando de ello. En la descripción de su perfil de Instagram puede leerse: Oferta de Empleo #Chicadeimagen #Model #Madrid. 

El local tenía antes de esta polémica 30 reseñas en Google. En ellas, destacan los comentarios negativos que denuncian la falta de higiene del lugar y los precios desorbitados. Fue, sin embargo, a raíz del tuit de Fernández que el restaurante recibió más de 400 comentarios denunciando esta situación.

El dueño fue borrando uno a uno todos ellos hasta que, el pasado sábado, llegó a borrar la página durante unas horas. Una vez reabierta, no ha podido evitar que se haya llenado otra vez de comentarios denunciando la explotación de mujeres. Esto también ha afectado a sus cuentas en Tripadvisor, El Tenedor y Job Today, plataformas en las que el negocio permanece bloqueado.