De trabajar en La Moncloa a llevar 1 décimo de El Gordo: el padre de Perla la animó a jugar en un sueño
La historia de una de las ganadoras, que estaba siendo testigo del sorteo de la Lotería de Navidad en el Teatro Real con 95 décimos en el bolso.
¡05.490! A la euforia tras salir el Gordo, sobre las 11:20 de la mañana, se sumó otro vuelco al corazón. Las cámaras de repente apuntaron al patio de butacas. Aplausos, lágrimas y todos los ojos puestos en una señora que se había echado a llorar. Entonces, estupor: ¿era una de las ganadoras?
Un vigilante de seguridad se acercó y la acompañó fuera del salón del sorteo. Unos minutos después, Perla, originaria de Perú, volvía a aparecer ante un corrillo de periodistas para sí, confirmar que le había tocado y un dato casi más sorprendente: llevaba 95 décimos en el bolso —sólo uno del Gordo, eso sí—. Su padre, fallecido, le dijo en un sueño que jugara.
“Es obra del cielo”, aseguró con la voz temblorosa.
Pese a que se acababa de enterar de que había ganado, ya sabía a qué iba a destinar el dinero: “Me voy a comprar una casa para mis hijos”. “En todas partes que he ido viajando con mis hijos he ido comprando décimos, entre Alicante, Valencia...”, explicó.
″Ahora mismo estoy desempleada. Yo fui una de las empleadas del palacio del Gobierno, cuando estaba trabajando en hostelería durante casi 20 años. Me echaron a la calle, estaba cobrando ahora mismo el paro”, ha relatado.
“Por eso digo que Dios es grande, Dios hace justicia”, ha remarcado antes de dar la vuelta al boleto para saber dónde había sido comprado. Lo adquirió en Asturias, durante unas vacaciones.
Un pequeño recordatorio sobre la inflación o por qué viene incluso mejor llevarse un premio este año.
También se ha visto algún que otro guiño a una visita adelantada de Sus Majestades de Oriente.
Otro de los disfraces que se han visto en el Teatro Real y que apunta a que no viene mal alguna que otra bendición.
Un asistente al sorteo, probablemente con el traje más apropiado para la fecha.
