Guerras, integrismo, yihadismo, fronteras y ocupación. Ni las estrellas más potentes pueden arrojar luz sobre el camino que lleva a una ciudad asfixiada tras un muro.
El año pasado, la escasez de componentes, los puertos colapsados y los contenedores bloqueados dejaron lagunas en el comercio. Ahora hay otra crisis, pero esa parece superada.
El año que ahora empieza va a tener un componente simbólico para la princesa de Asturias porque cumplirá 18 años y deberá jurar la Constitución ante el Congreso.