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Santiago Segura y José Mota abren la puerta de un castillo del siglo XIII jamás visitado al completo

Santiago Segura y José Mota abren la puerta de un castillo del siglo XIII jamás visitado al completo

Ambos actores son propietarios del enclave junto con el productor teatral, Luis Álvarez.

Castillo de Pedraza (Segovia), propiedad de Luis Álvarez, Santiago Segura y José Mota.Getty Images

El castillo de Pedraza (Segovia), datado del siglo XIII, abrirá las puertas en su totalidad por primera vez en la historia reciente. La fortaleza, propiedad del productor teatral Luis Álvarez junto a sus socios, los actores Santiago Segura y José Mota, pertenecía hasta entonces a los descendientes del pintor Ignacio Zuloaga, que lo compró en 1925 por 13.000 pesetas.

En el momento de su compra, por 4,8 millones de euros, se anunció que iba a servir para acoger distintos eventos culturales, entre ellos conciertos. Pero ahora se ha conocido, tal y como informa la agencia de noticias de Castilla y León Ical y recoge Segovia Audaz que el enclave se va a abrir al público después de adherirse a la Red de Patrimonio Histórico. 

Esta red pertenece a una Asociación y Club de producto de Castillos y Palacios Turísticos de España, sin ánimo de lucro y de ámbito nacional, que tiene como objetivo principal impulsar y gestionar la Red de Patrimonio Histórico de España aunando gestores privados y públicos de monumentos históricos.

El castillo original data del siglo XIII y fue reedificado en el siglo XV por la familia de los Herrera, cuando se construyó la torre del Homenaje. Posteriormente, pasó a manos de Fernández de Velasco, duque de Frías y condestables de Castilla, que lo reformaron con la forma que tiene hoy día. Tras varios cambios de propietarios, asedios y abandonos, pasó a la familia Zuloaga en el siglo XX.

No obstante, en la ubicación de la fortaleza ya se habían asentado otros pueblos. A 1.060 metros de altitud y rodeado por las hoces de los arroyos Vadillo y Encinarejo, se encontraba también uno de los asentamientos romanos de la zona.

Titania
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Santander

Además, a este enclave histórico lo acompañan multitud de leyendas como la de los amantes Elvira y Roberto, que fueron supuestamente murieron viendo frustrado su amor y que se dice que se pueden ver todavía por la fortaleza.