Compra un disco duro nuevo, a estrenar, y se encuentra 800GB de datos valorados en miles de euros
El hallazgo incluye programas como Kontakt y Reaktor, habituales en estudios de producción musical profesional.
Un usuario que esperaba estrenar un disco SSD de 1 TB ha acabado encontrando un pequeño tesoro digital en su interior: 800 GB de datos ya grabados, entre ellos software de producción musical valorado en varios miles de euros. La historia, compartida en Reddit por el internauta conocido como All-Seeing_Hands, ha reabierto el debate sobre las trampas del comercio online y los riesgos de comprar tecnología por internet.
Según ha publicado Jeux Video, entre los programas preinstalados se encontraban Kontakt (valorado en unos 299 dólares) y Reaktor (por unos 199), dos herramientas muy utilizadas en la industria musical. El hallazgo resulta aún más inquietante porque el comprador había adquirido el producto como si fuera completamente nuevo.
Varios usuarios de la plataforma especularon con posibles explicaciones: desde que se tratara de una devolución que el vendedor no había revisado, hasta la posibilidad de que alguien hubiese precargado el disco con software pirata para tentar al comprador. También se ha planteado que ese contenido sirviera como cebo para infectar el equipo con malware si alguien intentaba instalarlo.
Fraudes, discos falsos y datos que no deberían estar ahí
El incidente pone el foco en una estafa bastante común: revender discos duros usados haciéndolos pasar por nuevos. Para ello, los timadores manipulan los registros SMART y FARM, que recogen datos clave sobre el uso del dispositivo. Así consiguen borrar cualquier rastro de desgaste y camuflar la trampa ante compradores inexpertos. Esta artimaña se ha detectado especialmente en unidades de la marca Seagate.
Otros casos recientes revelan prácticas igual de descaradas. Desde discos de 2 TB vendidos por apenas 10 dólares que resultan ser una carcasa vacía, hasta unidades falsas con componentes internos que ni siquiera almacenan información. También se han detectado modelos falsificados que, pese a mostrarse como funcionales, almacenan muy por debajo de la capacidad prometida.
Las plataformas de venta, aunque cuenten con sistemas de verificación, no siempre controlan con rigor los productos que se reenvían al mercado tras una devolución. En muchos casos, los dispositivos vuelven a circular sin revisión técnica ni formateo previo. Esto, además de suponer un riesgo de seguridad, también puede infringir la privacidad de quien los utilizó antes.
Para no caer en este tipo de fraudes, los expertos recomiendan comprar siempre a vendedores de confianza, revisar a fondo las valoraciones de otros usuarios, inspeccionar el producto nada más recibirlo y, sobre todo, formatearlo antes de usarlo, aunque venga precintado.
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