Un juez le da a Elon Musk donde más le duele: "La demanda de 'X' es un intento descarado de censura"

Un juez le da a Elon Musk donde más le duele: "La demanda de 'X' es un intento descarado de censura"

La red social pierde su demanda contra una organización que denunció el aumento de los discursos de odio en 'X' desde su atterizaje en la compañía, hace casi 2 años.

El propietario de 'X' y creador de Tesla o SpaceX, Elon Musk, en una imagen reciente.Kirsty Wigglesworth

Hace poco más de dos años, cuando Elon Musk se ofreció a comprar Twitter por 44.000 millones de dólares, el magnate sudafricano dijo que uno de los motivos que lo llevaban a tomar las riendas de una de las redes sociales con mayor influencia del mundo, era la de eliminar la censura y garantizar la libertad de expresión en la plataforma. Su entrada en la sede de la compañía con un lavabo dejaba claras sus intenciones. "Soy un absolutista de la libertad de expresión", llegó a decir el consejero delegado de Tesla y SpaceX antes de poner patas arriba lo que, según su opinión, era una moderación excesiva de los tuits.

Una afirmación que puso en alerta a los grupos defensores de los derechos humanos y a muchos investigadores, temerosos de que Twitter -rebautizada como 'X'- se convirtiese  en una plataforma de promoción para opiniones extremistas y los discursos de odio. "La libertad de expresión significa cosas diferentes en distintos lugares. Lo que Musk propone es libertad sin responsabilidad", criticó en su momento Robin Mansell, profesor de Nuevos Medios e Internet en la London School of Economics and Political Science.

Curiosamente, uno de los grupos que investiga el discurso de odio en internet y que acusó a la red social de Elon Musk de no tomar medidas para frenar estos discursos, el Center for Countering Digital Hate (CCDH), ha logrado una pequeña victoria judicial este lunes, después de que un juez rechazase la demanda presentada por la red social contra la organización por publicar un informe en el que aseguraba que la plataforma no frenaba el "99 % del odio emitido por los suscriptores de Twitter Blue" y denunció el denunció aumento de este tipo de discursos desde su llegada a la compañía.  

Musk y X acusaron en julio pasado a CCDH de poner en marcha una campaña para desacreditar a la red social y ahuyentar a los anunciantes en la red social con estudios que atribuían de "forma falsa" el aumento de contenidos dañinos. Pero el juez Charles Breyer, del Distrito Septentrional de California, desestimó el caso y señaló en su decisión que la demanda presentada es "descaradamente" un intento de censurar a CCDH. "Este es un caso para castigar a los demandados por su discurso", explicó el juez.

Breyer también rechazó la acusación de X Corp., la empresa de Musk que controla la red social, de que CCDH hubiera obtenido de forma ilegal los datos sobre los que basó sus análisis. "X Corp. ha presentado este caso para castigar a CCDH por las publicaciones de CCDH que criticaban a X Corp. y quizás para disuadir a otros que podrían desear entablar ese criticismo. Si las publicaciones de CCDH fueran difamadoras, eso sería distinto, pero X Corp. ha evitado decir que lo eran", añadió el juez.

El consejero delegado de CCDH, Imran Ahmed, calificó en un comunicado que las acciones de Musk eran "una ruidosa e hipócrita campaña de acoso, abuso y 'lawfare'". "Esperamos que esta histórica sentencia anime a investigadores en todo el mundo a seguir, e incluso intensificar, su vital trabajo para responsabilizar a las compañías de medios sociales por el odio y desinformación que contienen así como por el daño que causan", añadió Ahmed.

Por su parte, la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) aplaudió la decisión y dijo que protege la Primera Enmienda de la Constitución estadounidense. Alex Abdo, del Knight First Amendment Institute de la Universidad de Columbia, añadió: "Esta es una importante decisión que identifica la demanda de Elon Musk como lo que es, un intento de castigar a sus críticos por un discurso que está protegido constitucionalmente y para impedir que los investigadores estudien su plataforma".

Aunque Elon Musk no respondió de forma directa a la sentencia, en su cuenta de X el empresario repitió el mensaje de un usuario que señalaba: "Esta plataforma siempre luchará por la libertad de expresión".