Elon Musk comparte vídeo del primer "telépata" tecnológico gracias al implante Neuralink

Elon Musk comparte vídeo del primer "telépata" tecnológico gracias al implante Neuralink

"Ha cambiado mi vida", asegura Noland Arbaugh, un joven que quedó tetrapléjico a los ocho años. 

Elon MuskVariety via Getty Images

Neuralink ha compartido este miércoles un vídeo del primer paciente que ha empleado uno de sus microchips. La compañía especializada en neurotecnología, propiedad de Elon Musk, ha trabajado en este pequeño producto, del tamaño de una moneda, con el que busca que se pueda monitorizar la actividad del cerebro en el que se implante e influenciarlo. 

El paciente que protagoniza el vídeo que la empresa ha difundido a través de su perfil de X es Noland Arbaugh. Es un joven de 29 años originario de Estados Unidos que a la edad de 8 quedó tetrapléjico. Le implantaron este chip el pasado 30 de enero y, en el vídeo, se puede ver cómo es capaz de utilizar un ordenador sin ayuda de otra persona. 

En concreto, Arbaugh aparece participando en una partida de ajedrez a través de un ordenador. Y, aunque está acompañado, es gracias a este chip que mueve sus piezas. "Ha cambiado mi vida", aseguró hace unos días en una charla en directo que mantuvo con uno de los ingenieros de Neuralink, Bliss Chaman, y que ha recogido La Vanguardia

"No es perfecto. Diría que nos hemos encontrado con algunos problemas. No quiero que la gente piense que este es el final del viaje. Queda mucho trabajo por hacer, pero ya ha cambiado mi vida", afirmó el joven de 28 años. 

De hecho, la empresa afirma que irá más allá. Su principal objetivo pasa por eliminar la barrera que separa a los robots de los seres humanos. Y su primer proyecto es Telepathy. Según explicó a principios de año el propio Musk a través de su red social, "permite controlar tu teléfono o computadora, y a través de ellos casi cualquier dispositivo, con solo pensar"

"Los usuarios iniciales serán aquellos que hayan perdido el uso de sus extremidades", como es el caso de Arbaugh, prosiguió en su explicación. "Imagínense si Stephen Hawking pudiera comunicarse más rápido que un veloz mecanógrafo o un subastador. Ese es el objetivo", apostilló.