James Cameron prueba que Jack tenía que morir en 'Titanic'

James Cameron prueba que Jack tenía que morir en 'Titanic'

La película cumple 25 años.

Un fotograma de 'Titanic'.CBS Photo Archive via Getty Images

La película Titanic cumple 25 años y durante todo este tiempo se ha argumentado que el personaje de Jack, interpretado por Leonardo DiCaprio, podía haber sobrevivido. Sin embargo, el director James Cameron acaba de revelar que llegó a hacer un “estudio científico” que demostraba lo contrario.

La famosa película ganadora del Oscar terminaba con Jack sacrificándose, al quedarse en las heladas aguas del océano, para que Rose (Kate Winslet) pudiera sobrevivir aferrada a un tablón de madera. Muchos espectadores son de la opinión de que los dos hubieran cabido sobre la tabla.

“Realizamos un estudio científico para poner fin a todo esto de una vez por todas”, declaró Cameron a Postmedia. “Hemos realizado un análisis forense exhaustivo con un experto en hipotermia que reprodujo la balsa de la película”, detalló.

En 2012, los presentadores del programa MythBusters realizaron su propio experimento y presentaron los hallazgos a Cameron. Éste sugería que tanto Jack como Rose podrían haber compartido el tablón, pero eso no convenció al director. “Son tipos divertidos y me encantó hacer el programa con ellos, pero eran tonterías”, comentó Cameron más tarde a The Daily Beast.

Sobre su nuevo experimento, Cameron explicó a Postmedia: “Tomamos a dos especialistas que tenían la misma masa corporal que Kate y Leo y les pusimos sensores por todas partes, incluso por dentro, y los metimos en agua helada para probar si podrían haber sobrevivido a través de diversos métodos”.

Según el director, los resultados mostraron que “no había forma de que ambos pudieran haber sobrevivido”. También argumentó que el personaje de Jack “debía morir” en aras de los temas de la película de “amor, sacrificio y mortalidad”.

“Tal vez... tal vez... después de 25 años por fin ya no tendré que lidiar con esto”, afirmó Cameron a Postmedia.

Este artículo fue originalmente publicado en la edición británica del HuffPost y ha sido traducido del inglés.