Polonia teme un efecto rebote de la muerte de Prigozhin

Polonia teme un efecto rebote de la muerte de Prigozhin

El nuevo ‘jefe’ de Wagner preocupa seriamente al país europeo.

Yevgeny Prigozhin en su última aparición pública en África a través de un vídeo publicado en TelegramTELEGRAM

Polonia se pone alerta tras la muerte del fundador y líder del Grupo Wagner, Yevgeni Prigozhin, y de su círculo de confianza en el siniestro de un avión que volaba desde Moscú a San Petersburgo.

En opinión del primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, el peligro para Polonia se multiplica, ya que el grupo de mercenarios sería "una amenaza mayor" tras la muerte de su jefe.

Morawiecki argumenta que “bajo la tutela” directa del Kremlin y, especialmente, del presidente de Rusia, Vladímir Putin, el Grupo Wagner podría emprender nuevas acciones de desestabilización.

Respecto a la autoría del suceso, el primer ministro de Polonia no ha querido pronunciarse: “No diré si fue un accidente o no”. Aunque sí que ha deslizado que “todos los polacos” pueden sacar sus propias conclusiones.

El jefe de Grupo Wagner ha perdido la vida dos meses después de que sus mercenarios lanzasen una rebelión sin precedentes contra la cúpula militar rusa, que se saldó con un paso atrás de Prigozhin y el traslado de estos efectivos a Bielorrusia (país con el que Polonia comparte frontera).

Refuerzo de la frontera polaca con Bielorrusia

De hecho, a raíz de ese traslado del Grupo Wagner a Bielorrusia y de una violación del espacio aéreo polaco por parte de dos helicópteros bielorrusos, Polonia decidió este mismo mes de agosto blindar su frontera con el despliegue de 2.000 militares.

"El refuerzo no será de 1.000, sino de 2.000 militares. Tal decisión fue tomada por el Comité de Seguridad", subrayó entonces el viceministro del Interior de Polonia, Maciej Wasik.

Ahora, según Morawiecki, que ya había advertido en reiteradas ocasiones del riesgo que representaba este traslado del grupo de mercenarios a suelo bielorruso, la supervisión de Wagner recae "directamente" en Putin, tal y como recoge la agencia PAP.

En consecuencia, el primer ministro polaco ha alertado de que puede ser "un instrumento de provocación, chantaje y todo tipo de actos de agresión" para desestabilizar países que, como Polonia, tienen frontera con Rusia o Bielorrusia.