Siete alimentos que no sabías que pueden provocarte migraña
Junto con otro tipo de desencadenantes.
Uno de los factores clave para gozar de buena salud es la alimentación que seguimos. Los productos que consumimos no sólo repercuten a la hora de aportar vitaminas y nutrientes. Algunos, incluso, pueden contribuir a que algunas personas, junto con otros desencadenantes, sufran migrañas.
Así lo recoge el portal especializado en medicina Healthline. Apuntan que no hay un motivo "universal" que haga que las personas padezcan este dolor. Pero sí que "existen algunos desencadenantes comunes que pueden causar o contribuir a los episodios de migraña en algunas personas", detallan en su artículo.
En el mismo artículo, han compartido una lista de siete alimentos que contribuyen a que se dé esta sintomatología. Son los siguientes:
1. El chocolate
El portal, que cita a la Fundación Americana de la Migraña, apunta que el chocolate es el segundo producto alimentario que más afecta en este sentido, únicamente adelantado por el alcohol. En cifras, apunta que afecta al 22% de las personas que padecen migraña. El motivo radica en el contenido en beta feniletilamina y cafeína que tiene el chocolate.
2. La cafeína
Más allá de los efectos que la cafeína puede tener sobre el organismo si se toma en chocolate, en otros alimentos también puede tener la misma consecuencia. Así lo detalla el ya mencionado portal, que asegura que tomar demasiada cafeína y después experimentar abstinencia de la misma puede producir migraña.
Sin embargo, también precisan que el consumo ocasional de cafeína puede servir de alivio para el dolor de cabeza. Algunos alimentos que contienen cafeína son el chocolate, el café y el té.
3. Carnes curadas
Las carnes curadas son, por ejemplo, las salchichas o el embutido. Todas ellas tienen algo en común: conservantes. Estos son los que consiguen que el alimento en cuestión preserve el sabor y el color en el tiempo.
Sin embargo, pueden liberar óxido nítrico, que, en teoría, ayuda a dilatar los vasos sanguíneos en el cerebro pudiendo ocasionar dolor de cabeza.
4. Quesos añejos
Los quesos también forman parte de esta lista. En concreto, los añejos, como el queso azul. Ello se debe a que tienen una sustancia denominada tiramina, que se forma cuando pasan los años y los alimentos siguen ese proceso de añejamiento.
Por lo tanto, según va pasando el tiempo, más de esta sustancia albergará el alimento en cuestión. Y es la que desencadena esos dolores de cabeza.
5. El aspartamo
Los edulcorantes artificiales se usan como una de las vías alternativas al azúcar. Algunos, incluso, aportan un sabor mucho más dulce. Es el caso el aspartamo, "un edulcorante artificial, hipocalórico y aproximadamente 200 veces más dulce que el azúcar", según explica la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria.
Este, además, es uno de los alimentos que el portal Healthline ha incorporado a su lista, dado que también está considerado uno de estos desencadenantes de padecer un episodio de migraña.
6. El glutamato monosódico
El glutamato monosódico (MSG) es un tipo de sal de sodio. Este se usa en distintos alimentos a modo de aditivo. Y, aunque está considerado un aditivo alimenticio seguro para el consumo, desde Healthline apuntan que puede estar relacionado con la migraña.
El portal, de hecho, reporta que la Fundación Americana de la Migraña ha apuntado que puede ser el desencadenante de "episodios de migraña grave" entre el 10 y el 15% de las personas con migraña.
7. El alcohol
El alcohol es uno de los productos que más comúnmente se cree que desencadena la migraña. Ello se debe a que puede provocar deshidratación, un factor que puede contribuir al desarrollo de los dolores de cabeza.
Otros alimentos
Estos son algunos de los alimentos que pueden favorecer que una persona, con condicionantes previos pueda desarrollar un episodio de migraña. Pero no son los únicos.
El ya mencionado portal también especifica que lo mismo puede ocurrir con los alimentos encurtidos y fermentados, dado que suelen contener tiramina en niveles altos. Sucede lo mismo con los alimentos y bebidas congeladas, si se consumen muy rápido.
O los alimentos salados, "especialmente los procesados", apuntan desde Healthline, ya que es probable que contengan conservantes, y, por tanto, altos niveles de sodio.
