¿Qué se entiende por voto útil?

A la hora de votar, existen múltiples criterios a seguir. Y uno de ellos puede ser el ‘táctico’. En ese sentido, una de las mayores muestras de ese tipo de planteamiento es lo que se conoce como ‘voto útil’.

En estos últimos días de campaña electoral, casi todos los partidos políticos han apelado a ese voto útil con el objetivo de movilizar a ese electorado que aún está indeciso pese a que la llamada a las urnas es inminente.

Pero ¿qué es en sí el voto útil? Es un tipo de voto que se decide teniendo en cuenta cuál será el eventual resultado de las elecciones. Por lo tanto, los partidos minoritarios se ven perjudicados por los electores que se decantan por esta estrategia, ya que una de las prioridades es no otorgar el voto a una formación que pueda quedarse fuera de la institución pública que se elige.

El voto útil busca concentrar el voto y evitar su dispersión en múltiples partidos políticos de ideología parecida (una fragmentación que penaliza la Ley d’Hont que rige el sistema electoral español).

Por lo tanto, aquellos que optan por ejercer un ‘voto útil’ valoran cuáles son las posibilidades de cada candidato a los comicios y, en base a ello, decide apoyar a uno o a otro partido político.

Esta clase de voto suele favorecer la polarización y, en ciertos casos, el bipartidismo. De hecho, el diccionario panhispánico del español jurídico define el voto útil de la siguiente forma: “Voto que ante una decisión se emite a favor de una opción que, aun no siendo la preferida, tiene mayores posibilidades de derrotar a otra cuyo triunfo no se desea”.

Un ejemplo actual de voto útil podría darse en personas que en anteriores elecciones hayan votado a Ciudadanos. La mayoría de sondeos señalan que el partido naranja no obtendría representación en muchos municipios y regiones, por lo que parte de esos electores podrían optar por darle su apoyo a otras formaciones que sí que tengan más opciones de lograr escaños.