El error por el que cayeron los detenidos del 'caso Vidal Quadras': un coche mal aparcado

Continúan las pesquisas en el marco del atentado que sufrió Alejo Vidal Quadras, cofundador de Vox y exlíder del PP catalán, en el centro de Madrid tras recibir un disparo en la cara. Después de que la Policía procediese ayer al arresto de tres personas relacionadas con el ataque -aunque se descarta que sean los autores materiales del disparo-, aún se busca a una cuarta persona implicada en un incidente que la propia víctima achaca al régimen de Irán. 

Se trataría de un hombre de nacionalidad tunecina, implicado presuntamente en el tiroteo a Vidas-Quadras junto a una pareja detenida en Lanjarón (Granada), él de nacionalidad española y ella británica, y un hombre español en Fuengirola (Málaga). De momento, se desconoce el presunto grado de implicación que podría haber tenido esta cuarta persona en el ataque.

Con todo, han trascendido ya varios factores clave que han permitido desbloquear la siguiente fase de la investigación iniciada ayer. El principal ha sido cómo los profesionales de la Comisaría General de Información lograron dar con el paradero de la pareja en la localidad granadina de Lanjarón. Lo que a priori podría parecer una decisión irrelevante de ambos, acabó confirmándose como un error determinante. Un simple coche mal aparcado.

Una feria, una explanada en obras y una llamada del Ayuntamiento

Según comunicó a la Agencia EFE el alcalde de Lanjarón, Eric Escobedo, la pareja había alquilado hacía poco un piso en la avenida de la Alpujarra. Los propios vecinos confirmaron al mismo medio que  la madre de ella, también de nacionalidad británica, sí llevaba años viviendo en Lanjarón.

Sin embargo, el coche no lo habían aparcado en esa avenida, sino que lo estacionaron en una calle paralela. Sin percatarse de una cuestión importante. La explanada estaba en obras porque en ese punto se celebrará la Feria Agroalimentaria y de la Miel de Lanjarón. El coche había sido alquilado en Málaga, y según recoge la Cadena SER, como desde el Ayuntamiento necesitaban espacio para continuar con el acondicionamiento de la zona, contactaron con la empresa que lo alquiló. Y ése fue el detonante perfecto para el equipo de agentes que seguía las pistas.