Los estafadores ingenian métodos cada vez más sofisticados para robar el dinero de sus víctimas, haciéndose pasar incluso por su propio banco. En este sentido, la Asociación Finlandesa de Telemarketing ha pedido a los usuarios que tengan más cuidado con los mensajes fraudulentos que reciben en nombre de su banco, redactados usualmente como urgentes. 

Uno de los peligros de este tipo de estafa es que los mensajes suelen parecen reales, es decir, puede que el nombre que aparezca en el mensaje sea el de nuestro banco y que la apariencia sea prácticamente igual a los habituales que solemos recibir. Sin embargo, al pinchar en el enlace y comenzar a poner nuestras credenciales, la estafa ha comenzado.

"Mensajes como este se basan en gran medida en evocar un sentido de urgencia y preocupación. Pueden parecer sorprendentemente genuinos y provenir de direcciones que se asemejan a los datos de contacto de autoridades o bancos reales. Cuando los estafadores consiguen que el destinatario se apresure, la estafa tiene posibilidades de éxito", explica Arto Isokoski en un comunicado de prensa. 

En el caso de sospechar que se ha caído en este tipo de estafa, la mejor recomendación es contactar con el banco de inmediato para reducir el daño financiero.