Una imagen vale más que mil palabras: lo que nos cuentan los candidatos con su ropa

Una imagen vale más que mil palabras: lo que nos cuentan los candidatos con su ropa

Pedro Sánchez, Alberto Núñez Feijóo, Yolanda Díaz y Santiago Abascal no dan puntada sin hilo. 

Los candidatos a las elecciones generales del 23 de julioEFE/GETTY

En campaña electoral toda ayuda es poca para que los candidatos consigan trasladar sus mensajes a los ciudadanos. Por eso se valen de mítines, entrevistas, debates y también de su armario. La imagen y la indumentaria son fundamentales en la percepción que tiene el electorado de los políticos, y ellos lo saben.

Los cuatro candidatos principales de las elecciones generales del 23 de julio, Pedro Sánchez, Alberto Núñez Feijóo, Yolanda Díaz y Santiago Abascal, han utilizado sus prendas para enviar mensajes a los españoles y algunos han sufrido un cambio acelerado en los últimos meses para intentar parecer lo que todos buscan: un ciudadano más.

“Hay una cuestión importante en estas elecciones generales que es que hay una mujer que es candidata, Yolanda Díaz, y claro, eso supone una diferencia porque hasta ahora en general lo que hemos visto son todo hombres, entonces eso cambia un poco también las dinámicas de comentar vestuario, y del uso de la moda como una herramienta de comunicación política”, explica Ana Velasco, periodista, historiadora y experta en estudios de moda, cambio social, historia contemporánea y comunicación. “Si te das cuenta, ahora mismo Sánchez, Feijóo y Abascal van vestidos prácticamente iguales”, señala.

Es algo en lo que también coincide Diana Rubio, doctora en comunicación, politóloga y experta en protocolo, imagen y etiqueta. “La verdad es que están coincidiendo los tres, Abascal, Sánchez y Feijóo, en esa camisa blanca o una camisa muy clara que contrasta con un pantalón oscuro y la chaqueta fuera obviamente por las temperaturas que estamos teniendo, aunque es cierto que sí están utilizando las chaquetas para momentos formales”, destaca la experta.

  Feijóo en un mítin en Ciudad RealEuropa Press via Getty Images

De hecho, para Rubio, la camisa blanca está siendo la prenda por excelencia de esta campaña debido al verano y a las olas de calor. “El uniforme de estas elecciones es la camisa blanca, porque Yolanda Díaz también se la ha puesto, ella va mucho de blanco. Además el blanco es el color de la pureza, de la transparencia...”, destaca la experta en imagen, que recuerda que además para actos de campaña no aporta tanta formalidad como un traje. Con más de 40 grados en algunas zonas de España, Rubio apunta también otra ventaja de esta prenda: “Es un color en el que se nota menos el sudor que en otros colores de camisa. Y ahora con esa mezcla explosiva del calor y que cuando hay que hablar y tenemos una situación de estrés y nerviosismo también sudamos”.

“Pedro Sánchez sí que ha marcado una distancia muy grande entre lo que es Pedro Sánchez presidente y Pedro Sánchez candidato. Porque como presidente va con traje y corbata y como candidato va con pantalón vaquero, muchas veces con camisa vaquera y, cuando no, pues con blanca o azul”, explica Velasco, que recuerda que en 2016 se le critició porque iba “siempre igual” con camisa blanca, traje y corbata roja.

Velasco recuerda que la irrupción de Podemos y Ciudadanos en la política institucional hizo que avanzaran “las dinámicas de mayor informalidad” y eso se nota hasta en los candidatos más conservadores. En este sentido, la experta señala que Feijóo y Abascal también apuestan para sus actos por camisas sin corbata y sin trajes, aunque con una diferencia en el candidato de ultraderecha. “Suele llevar la camisa más abierta, él suele tener esta vena un poco más despechugada que le da un aire más informal. Porque él es un candidato de ultraderecha pero se presenta como un candidato antisistema, luego juega con las dinámicas de la derecha que podrían ser el traje con la corbata pero va informal”, explica Velasco.

La investigadora tiene claro lo que quieren transmitir con esas prendas: “Que son gente corriente, ‘somos uno más’. Entonces no se ponen traje, no se ponen corbata, no se ponen algo que sea más formal. E hilan bastante fino”. Entre esos ejemplos de hilar fino, Velasco recuerda que Abascal tuvo una fase “con las camisas en color caqui, en colores militares, en las mascarillas de la guardia civil, la pulserita con la bandera de España”, mientras que Sánchez llegó a El Hormiguero con una pulsera con la bandera LGTBI. “Eso no se lo pone Feijóo...”, apunta.

“Ellos tres están jugando la baza esta de candidato hombre corriente, uno más de los votantes, ya sean de derechas o sean de izquierdas. La gran diferencia es Yolanda Díaz”
Ana Velasco, periodista, historiadora y experta en estudios de moda, cambio social, historia contemporánea y comunicación. 

“Ellos tres son hombres y están jugando la baza esta de candidato hombre corriente, uno más de los votantes, ya sean de derechas o sean de izquierdas. La gran diferencia es Yolanda Díaz”, asegura Velasco.

Pedro Sánchez presidente vs Pedro Sánchez candidato

Tanto Rubio como Velasco coinciden en este cambio de Pedro Sánchez en los actos más institucionales como presidente del Gobierno al candidato socialista en los mítines o actos de campaña. Para Rubio se puede decir que Sánchez tiene “un estilo actual” y que “va buscando dar ese rol a través de la vestimenta al ser secretario general del PSOE, que tiene unos valores, una misión y un visión como partido político, y luego hacerlo como presidente del gobierno”.

“Te pongo un ejemplo. El año pasado con las corbatas y la crisis energética él dijo que solo iba a ponerse corbata en los actos más solemnes, de mayor formalidad. Esa es una forma también de mostrar la diferenciación y los diferentes roles que puede tener un político. En este caso, el rol de partido y el institucional, donde él sabe perfectamente que tiene que llevar un traje de chaqueta porque va vestido de la misma manera que todos sus homólogos”, explica la experta en imagen y protocolo.

“Va buscando dar ese rol a través de la vestimenta al ser secretario general del PSOE, que tiene unos valores, una misión y un visión como partido político, y luego hacerlo como presidente del gobierno”
Diana Rubio, doctora en comunicación, politóloga y experta en protocolo, imagen y etiqueta.

En los actos de campaña y las entrevistas más informales, la camisa vaquera se ha convertido en la prenda fetiche de Sánchez. ¿Por qué? “Yo creo que el tejido vaquero es el tejido más democrático que hay en 2023. Todo el mundo tiene un pantalón vaquero, todo el mundo lo lleva, y el salto ese del pantalón vaquero más la camisa vaquera pues le hace más popular. Porque ni siquiera es una camisa blanca o azul, es una camisa de trabajo, que realmente es como surgen las camisas vaqueras”, detalla Ana Velasco.

“Yo creo que en el discurso del Partido Socialista, esa idea de soy una persona cercana e informal, y esa idea de El Hormiguero, de ‘he venido a divertirme a El Hormiguero...’, de estoy en campaña pero vengo a divertirme... es esa idea de la autenticidad, de desmarcarse del Pedro Sánchez presidente porque son dos personas diferentes y él quiere remarcarlo”, añade la investigadora.

Yolanda Díaz, un cambio de paradigma

Además de una gran diferencia respecto a los tres candidatos hombres, para Ana Velasco el estilo de Yolanda Díaz también es una “paradoja” respecto a lo que venían haciendo habitualmente los políticos y políticas de izquierdas. “No se ha dado antes porque con Pablo Iglesias... Él vestía fatal, él lo sabía y jugaba con eso, jugaba con esa imagen de que era muy auténtico. Pero Yolanda Díaz ha dado un salto que es verdad que va muy elegante y muy sofisticada, ahí está lo de la fashionaria y lo de la tenacillas. Para Rubio, Díaz es una mujer “cosmopolita” y que “se nota que le gusta mucho la moda”. “Podemos decir que es una mujer que viste acorde al momento en el que nos encontramos, una mujer bastante acorde al siglo XXI. No es un estilo impuesto y eso está bien porque lo peor es disfrazar a los políticos. No pueden perder la esencia porque si no trasmiten lo que no son”, señala.

"La americana no está en el vocabulario de Yolanda Díaz, esa prenda ha desaparecido. Tiene sus propias dinámicas y una constancia en el estilo que es discreto, pero elegante y llama la atención para lo que suele ser un partido de izquierdas”
Ana Velasco

“Hay una cosa que me ha llamado mucho la atención y es que lleva vestidos de tirantes o tops de tirantes que dejan los brazos al aire y que no llevan escote. Me llama la atención porque normalmente se entiende que los brazos desnudos son muy informales. También que lleva muchos vestidos de colores lisos. Y me he fijado que lleva muchos Converse incluso con vestido, no lleva alpargata por ejemplo como la reina, ni sandalias planas. Le ha dado un aspecto muy moderno y de gente corriente, de ‘estoy aquí trabajando”, apunta Velasco.

A ella también le ha resultado llamativo que vista con “pantalones blancos con tops de colores” ya que, explica, es un gran cambio. “Es un salto muy grande de aquella época de Soraya Sáenz de Santamaría en la que llevaban las americanas de colores remangadas. Pues es que la americana... es que no está en el vocabulario de Yolanda Díaz, esa prenda ha desaparecido. Tiene sus propias dinámicas y una constancia en el estilo que es discreto, pero elegante y llama la atención para lo que suele ser un partido de izquierdas”, sentencia Velasco sobre la candidata de Sumar. 

Tradicionalmente, las mujeres políticas han adaptado trajes de chaqueta, americanas y siluetas duras para hacerse un hueco en un mundo de hombres, algo que no ha hecho Díaz y de ahí que llame la atención. “El problema que tenemos en este caso es que las mujeres se han masculinizado a través de la vestimenta, cosa que ella no está haciendo, ella está feminizando la vestimenta, entonces creo que ahí está el punto rompedor que tiene con su manera de vestir”, opina Rubio.

“El problema que tenemos es que las mujeres se han masculinizado a través de la vestimenta, cosa que ella no está haciendo, ella está feminizando la vestimenta, entonces creo que ahí está el punto rompedor que tiene con su manera de vestir”
Diana Rubio

“Eso de power women está superado. Ella va femenina, va con vestido, va ‘destapada’, no tiene nada que ver con una Margaret Thatcher o Angela Merkel que iba siempre igual cambiando de color las americanas. Y yo creo que Yolanda Díaz no es agresiva, se presenta con una apariencia tan cuidada, no es como esa imagen que vendía alguna gente de podemitas o perroflautas. No tiene nada que ver. Es muy de izquierdas pero en tu mente es una señora. Y realmente creo que no es fingido, no está disfrazada”, señala por su parte Velasco.

El tema ideológico es algo en lo que también incide Rubio. “Es bastante notable en una ideología donde la preocupación por la imagen supuestamente no es tan importante, pero ella sí está demostrando que es importante, por mucho que digan que no pinta nada”, defiende. “Es un ejemplo de la importancia que con los años ha tomado la feminización de la imagen. Es la única mujer líder que se está presentando en contra de tres hombres y es otra manera de diferenciarse de ellos, a través de la ropa y la imagen”, añade la experta.

El rejuvenecimiento de Feijóo

Rubio define el estilo de Feijóo como “conservador”, aunque destaca que en los últimos meses han querido darle “unos tintes juveniles”. Es algo que también ha observado Velasco, que cree que “en los últimos meses ha perdido diez años”. “Lo que me ha chocado mucho en los últimos días es que Feijóo siempre ha sido un hombre que ha ido con los trajes impolutos, perfectos, con los trajes a medida, igual que Sánchez que además tiene porte. Pero en el caso de Feijóo, ese momento chaqueta de verano en la entrevista de El Hormiguero... quieren hacer su imagen más acorde a la ciudadanía y quitarle un poco esa formalidad que él ha tenido durante los años de presidente de la Xunta”, señala Rubio sobre el cambio de estilo del candidato del PP.

"Quieren hacer su imagen más acorde a la ciudadanía y quitarle un poco esa formalidad que él ha tenido durante los años de presidente de la Xunta”
Diana Rubio

Velasco matiza que, a pesar de que Feijóo sea tradicional, no tiene el clásico uniforme cayetano. “Pablo Casado sí era el clásico cayetano, con ese chaleco y esas chaquetas azul marino guateadas. Era totalmente Nuevas Generaciones. Feijóo está más en el PP de Rajoy, no es el PP de Nuevas Generaciones que era muy de Madrid, de la pulserita de España”, cuenta la investigadora. “Feijóo es un señor estándar, que puede ser cualquiera, y no tiene un perfil público muy destacado. Pues del PP y ya está, no tiene mucho carisma”, añade.

Abascal y la legión

Además de “bastante tradicional” Rubio señala una característica muy comentada del canditado de Vox. “Va muy ajustado, sí. El botón a estallar, la camiseta... suele ir siempre con ropa bastante ajustada”, señala la experta, que cuenta que Abascal está utilizando mucho el polo en esta campaña.

"Abascal cuando va con esos pantalones arremetidos es un poco la dinámica de marcar paquete y de la legión, que al final el uniforme es esa camisa apretada y con el pecho totalmente abierto"
Ana Velasco

Según Velasco, ese estilo apretado tiene un paralelismo con el ejército. “Para mí la imagen de Abascal cuando va con esos pantalones arremetidos es un poco la dinámica de marcar paquete y de la legión. A mí me recuerda muchísimo a la legión que al final el uniforme es esa camisa apretada y con el pecho totalmente abierto, a mí me da ese aire”, asegura la investigadora, que también cree que ha influido la moda de los pitillos ultrajustados de hace unos años.

“Esa estética cayetana también ha cuajado en Vox, pero un poco más allá. No sé si es una cosa consciente lo de la legión o una deriva del uniforme cayetano, pero hay algo de inspiración militar. Rocío Monasterio por ejemplo iba vestida de exploradora en la campaña de Madrid, que uno decía ‘¿Dónde va? ¿A cazar?”, comenta Velasco. “Pienso que es una continuación del estilo de cayetano estándar de nuevas generaciones del PP pasado por la estética militar y la legión”, concluye.