La estrategia final de Ayuso

La estrategia final de Ayuso

El PP confía en una amplia mayoría de una "institucional" Ayuso y cree que el clima de crispación está beneficiando a los extremos pero no mucho.

Ayuso en Torrejón de ArdozFERNANDO VILLAR / EFE

Arrancando hojas del calendario. El equipo de la presidenta Isabel Díaz Ayuso cuenta los días que faltan para que acabe ya la campaña electoral. Son las últimas jornadas en las que no quieren pronosticar un resultado concreto hasta que se abran las urnas, pero con la sensación de que se cumplirán las encuestas que le dan esta holgada mayoría la noche del 4-M y retendrán con más poder la Puerta del Sol.

La campaña viró la semana pasada tras el debate de la Cadena SER, al que no acudió Ayuso, por la actitud de Vox y el inicio del espiral de amenazas por correo que están recibiendo políticos -incluida la propia presidenta-. La ‘popular’ ha tomado la decisión de intentar no dar importancia a esas cartas y decir que esto debería quedarse en la intimidad. Para ella, la izquierda está “sobreactuando” y montando “un circo”.

¿Cómo interpretan electoralmente en la candidatura de Ayuso el clima de tensión que se está viviendo? Fuentes de su entorno dicen que es irresponsable lo que se está viendo durante estos días y creen que el otro bloque azuza esa sensación porque creen que movilizan así (la participación será clave el martes electoral). En su cuartel general han analizado la situación y creen que esto beneficia a los “extremos” -Vox y Unidas Podemos-, pero detectan que no mucho como se puede creer.

  Monaterio y Ayuso en el debate de TelemadridEFE

En el PP de Madrid creen que la campaña, que siempre puede ser muy peligrosa, les ha ido bien y destacan que en estos días se está viendo a una Isabel Díaz Ayuso con carácter institucional y capaz de aglutinar también al centro después del giro de Ángel Gabilondo (que ahora apuesta por pactar con Pablo Iglesias). De hecho, unas lecturas que hacen durante estas horas en el equipo de la popular es que el PSOE se está hundiendo.

Lo dicen después de repasar con detenimiento las últimas encuestas y se fijan, por ejemplo, en la publicada por El País, con estudio de Metroscopia. En ese sondeo se da a los populares 59 escaños, lo que supondría mayoría absoluta sumando a Vox (13). En cambio el PSOE se queda en 28 (nueve menos que hace dos años), con Más Madrid pisándole los talones, con 25. Unidas Podemos se situaría en once asientos en la Asamblea, en tanto que Cs ni entraría.

En la candidatura de Ayuso creen que la polarización da votos a Vox y UP pero que no afectará mucho al resultado

También se ha leído con atención el sondeo de GAD3 para ABC, que pone a Ayuso en primer lugar, rozando sola la mayoría absoluta, con 62-6. Superaría los deseados 69 con Vox -14-. La izquierda quedaría así: PSOE (27-29), Más Madrid (20-21) y Unidas Podemos (11). La participación podría estar sobre el 76%, pronostica el estudio de Narciso Michavila, lo que supondría ocho puntos más que en las anteriores elecciones.

Números y mensajes. En los últimos días desde la izquierda se intenta presionar a Ayuso por su posible alianza con Vox, algo impensable en países como Francia y Alemania. Pero la líder del PP salió pronto a decir: ‘no’ al cordón sanitario. Los “violentos” son Podemos, ha llegado a comentar. Algo que sintoniza totalmente con su electorado, ya que el 78% de sus votantes aprobaría ese gobierno de coalición con la ultraderecha, según los datos de la encuesta de Metrosocopia. Además, ese no rechazo ideológico también sirve para intentar seguir captando votos del caladero ultra, aunque los de Rocío Monasterio pueden verse beneficiados ahora de esa polarización con Iglesias. De hecho, en el equipo de Ayuso advierten de que UP también está crispando buscando la respuesta de Vox, con declaraciones como las que hizo el candidato sobre la casa real.

  AyusoEFE

Mientras pasan los últimos días, Ayuso y el PP están intentando poner varios temas sobre la mesa que creen que juegan a su favor. Se han volcado en la bajada de impuestos en las últimas horas, sacando hasta una calculadora fiscal contra el PSOE. Ahí se siente cómoda Ayuso, con su discurso contra el “comunismo” y a favor de medidas laxas. Además, han vuelto a recurrir a ETA con actos diciendo que el 4-M se vota también por las víctimas del terrorismo. Asimismo, la presidenta está jaleando que Moncloa prepara medidas “impopulares” tras las elecciones. Para dar leña también contra Pablo Iglesias. “Nació del mal para hacer el mal”.

Los populares creen que el PSOE se está hundiendo en la parte final de la campaña

En Génova 13 esperan mientras a esa noche electoral y confían en que suponga una ola tras el fiasco de las catalanas. Casado quiere utilizar la victoria y el hipotético Gobierno de Madrid como su gran trampolín hacia La Moncloa. Fuentes populares comentan que Madrid puede servir también para terminar de engullir a Cs y presentarse como la única opción para que el centro derecha gane en España. Sus encuestas, confiesan, ya les dan empate técnico con Pedro Sánchez a nivel nacional. El modelo Ayuso se ha convertido en la referencia y en el PP esperan exportarlo a otras autonomías. Pero hay un posible choque a la vista: la entrada de Vox en el Ejecutivo. Esto colisionaría con el discurso de Casado que rompió con la ultraderecha durante la fallida moción de censura. Por eso confían en una amplia mayoría que sólo dependa desde fuera de la ultraderecha.

Quedan tres días para que acabe la campaña. El PP ya tiene ganas. Y a esperar las urnas.