“Hay posibilidades” pese al ruido del 12-O

La negociación discreta, la de verdad, continúa. Más allá de las declaraciones cruzadas en los tradicionales corrillos del día de la Fiesta Nacional, en ese objetivo de ganar la batalla del relato. En privado, Gobierno y PP son razonablemente optimistas y ven margen para un acuerdo en pocos días. La inédita crisis constitucional, agravada por la marcha definitiva de Carlos Lesmes, ha provocado que ambas partes hayan entendido que es ahora o nunca, a pesar de que públicamente Sánchez se niegue a cambiar el sistema de elección de los jueces y Feijóo reclame un compromiso “por escrito” en este sentido.

En todo caso, los negociadores están encapsulados al objeto de alcanzar el que sería el primer y único gran acuerdo de Estado entre el Ejecutivo y el principal partido de la oposición. “Estamos avanzando”, aseguraron desde una de las partes implicadas. “Hay posibilidades”, sentenciaron al más alto nivel. Un extremo que, pese al cruce de reproches, se escuchó por parte de Sánchez y Feijóo en las conversaciones sin cámaras delante del Palacio Real. “Se podría arreglar en cuestión de días”, llegó a afirmar el líder del PP.

Y en eso están. Así lo explica una importante fuente de Génova: “No es el momento de tensionar, vamos bien”.  Lo que se traduce en que Félix Bolaños y Esteban González Pons pretenden aislarse del ruido político y mediático y que la discreción marque la negociación, aunque Feijóo prometió luz y taquígrafos en la misma. Los nombramientos del nuevo CGPJ se harán con el modelo vigente, aunque el PP aprieta para que los perfiles no tengan pátina política y Sánchez dejó entrever que acepta. El problema viene con qué hacer en las sucesivas elecciones.

El PP quiere avanzar en el reforzamiento de la independencia del Poder Judicial. Así se lo reclamó a Sánchez primero Pablo Casado y ahora Feijóo. Y exige que ese compromiso de Sánchez sea por escrito. “Si alguien está conforme con un acuerdo, no debería tener problema en ponerlo por escrito. Si el gobierno no quiere reformar el sistema para mejorar nuestro Poder Judicial porque lo pide el PP, que lo haga porque lo pide la Comisión Europea”, destacaron fuentes populares. Un “compromiso” que el Ejecutivo niega, de momento, que vaya a ser un cambio de elección para que los jueces elijan a los jueces.

Tal y como avanzó El HuffPost, algunas voces sugieren que se ha podido avanzar en la fórmula que, con Casado en la presidencia del PP, planteó su entonces secretario general, Teodoro García Egea, a Bolaños: renovar los órganos pendientes y que sea el nuevo Consejo General del Poder Judicial el que proponga su propio modelo de elección.

Sea como fuere, tanto el Gobierno como el PP han suavizado sus exigencias, han desdibujado aunque no por completo sus líneas rojas y han enfatizado que el clima es bueno y que esta vez sí se puede alcanzar un pacto. Y a ello se agarran las fuentes consultadas para enfatizar que “hay avances” solo tres días después de que Sánchez llamara de urgencia a Feijóo, tras la pregonada renuncia de Lesmes. “El diálogo está en marcha”, convinieron las dos partes de la negociación, para la renovación conjunta del Consejo General del Poder Judicial y el Tribunal Constitucional.