El Gobierno invertirá 522 millones en reforzar la investigación científica
El Consejo de Ministros aprueba también el anteproyecto de Ley de Prevención de Desperdicio Alimentario.
La ciencia es un sector clave y estratégico, tal y como ha quedado demostrado tras la pandemia. No obstante, la necesidad de una mayor financiación siempre ha sido una demanda constante que el Gobierno ha tratado de atajar en los últimos años. Por este motivo, el Ejecutivo realizará una inversión de 412 millones de euros para reforzar la investigación científica mediante un programa estatal, una medida que ha recibido luz verde este lunes en la reunión del Consejo de Ministros.
La ministra de Ciencia, Diana Morant, ha destacado la importancia de lanzar este programa estatal de investigación científico-técnico que contará a su vez con una reserva de 477 millones de euros. “La Ciencia salva vidas y solo desde el conocimiento se podrán guiar las mejores decisiones”, ha indicado sobre las dos convocatorias que estarán gestionadas por la Agencia Estatal de Investigación. Entre los beneficiarios de la ley se encontrarán tanto universidades como organismos públicos de innovación y centros privados de I+D sin ánimo de lucro.
En la misma línea se ha pronunciado la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, quien ha explicado que “el Gobierno tiene una prioridad clara, una apuesta por la ciencia para transformar nuestro país”. Se ha referido así a la necesidad de ahondar en el cambio de modelo productivo y al modernización que busca el Ejecutivo.
La segunda convocatoria serán las ayudas para contratación de investigadores predoctorales, dotada con 110 millones de euros. Se tratan de una serie de ayudas para que puedan desarrollar sus tesis doctorales en grupos. Se contratará a 1.100 nuevos investigadores durante los próximos cuatro años, según ha precisado Morant. Además podrán recibir una ayuda adicional de superior a los mil euros.
Una ley para evitar el desperdicio alimentario
Por su parte, el ministro de Agricultura y Pesca, Luis Planas, ha abordado la otra gran medida adoptada en el Consejo de Ministros. El Gobierno ha dado luz verde al anteproyecto de Ley de Prevención de Pérdidas y Desperdicio Alimentario, una norma que tratará de evitar el despilfarro de alimentos.
“Desde el punto de vista ético y moral hay un auténtico dilema”, ha esgrimido Planas. El objetivo es que en ningún eslabón de la cadena de producción y distribución sufra pérdidas. “Nos planteamos una jerarquía de prioridades”, ha desgranado el ministro, poniendo el foco en que la futura ley establecerá nuevas responsabilidades en todos los ámbitos de dicha cadena.
De igual forma, la ley establecerá mecanismos de seguimiento para evitar el despilfarro y reforzará el sistema de donación de los artículos antes de que caduquen. La norma propuesta también actuará sobre la fecha de referencia, aquella en la que el vendedor se compromete que tengan todas las características que el producto lleva en la etiqueta sin degradarse.
Otro de los elementos contenidos en la ley, ya empleado por algunas empresas, será el de fomentar la rebaja del precio de aquellos productos próximos a su caducidad, con el correspondiente destacado en el etiquetaje. En tiendas de más de 400 metros cuadrados será obligatorio disponer de un espacio en el que promocionar productos “poco estéticos”, pero que estén en perfecto estado, con especial foco en la venta a granel de frutas y hortalizas.
“Es algo más que una ley ordinaria, es llamar a un debate social”, ha precisado Luis Planas sobre el objetivo de la norma. “No hay producto alimentario más caro que aquel que acaba en la basura”, ha sentenciado el ministro de Agricultura, acerca de la ley que será objeto de debate con la Comunidades Autónomas en su camino a la tramitación parlamentaria.
