A bordo del Rainbow Warrior III para decir NO a las prospecciones de petróleo
No existe ninguna forma segura de extraer petróleo en aguas profundas. Estas prospecciones suponen un gran riesgo de vertidos, incendios y contaminación. Ocasionan también un fuerte impacto negativo sobre economías que se sustentan en el turismo.
La última vez que estuve en el Puerto de Valencia a bordo de un barco de Greenpeace fue en 2007, en una campaña para demandar medidas urgentes y efectivas para recuperar el Mar Mediterráneo para la ciudadanía y la naturaleza. La Autoridad Portuaria del Puerto de Valencia no permitió entonces que el barco de Greenpeace atracase y nos desviaron a Sagunto. En su memoria estaría la campaña contra la entrada de madera ilegal procedente de África que desarrollamos en 2003 y que acabaron con el Rainbow Warrior II detenido y con una multa de 300.000 euros, también lo viví en vivo y en directo. Finalmente el barco fue liberado, tras seis semanas de arresto, y una multa de 6.000 euros que finalmente fue retirada tras una intensa campaña de apoyo de la ciudadanía.
Cuando la mañana del domingo 8 de junio veo aparecer el Rainbow Warrior III por la bocana del puerto, los recuerdos se acumulan rápidamente en mi memoria. Aquí estamos de nuevo y esta vez sí nos han permitido amarrar. Esta vez venimos para decir alto y claro: No a las prospecciones petrolíferas en aguas profundas. Ni aquí, ni allí. Ni en el Ártico, ni en Canarias, ni en Baleares , Golfo de Valencia o el Golfo de León, ni en el Mar de Alborán, ni en la costa cantábrica.
El Rainbow Warrior estará en Valencia, Ibiza y Baleares para catalizar una respuesta común con organizaciones y plataformas como SaveCanarias, Columbretes Netes, Mar Blava que junto con Greenpeace y otras muchas organizaciones están trabajando para que el petróleo no sea una amenaza. Para expresar su rechazo a las prospecciones de petróleo. Para demandar el fin de la era de los combustibles fósiles y el nacimiento de la era de las energías renovables, el ahorro y la eficiencia energética.
No existe ninguna forma segura de extraer petróleo en aguas profundas. Estas prospecciones suponen un gran riesgo de vertidos, incendios y contaminación. Ocasionan también un fuerte impacto negativo sobre economías que se sustentan en el turismo. La fase de extracción de crudo es sin duda la más peligrosa, por el riesgo continuo de vertidos y la contaminación sistemática de las zonas limítrofes. Además, las válvulas de seguridad (BOP) usadas en las plataformas petrolíferas en aguas profundas adolecen de graves defectos de diseño con lo que se reproduciría la catástrofe ambiental ocurrida en la plataforma Deepwater Horizon de British Petroleum en el Golfo de México.
Buscar más petróleo o gas no resuelve el problema de la dependencia energética mientras que agrava los problemas ambientales y socio-económicos de los lugares afectados. Muy al contrario, es el momento de la revolución energética basada en las energías renovables y la eficiencia.
Los proyectos para extraer petróleo de las profundidades marinas, a tan solo 28 kilómetros de Ibiza, pondrían en peligro el organismo vivo más grande del mundo formado por ocho kilómetros de posidonia oceánica; a 10 kilómetros de un Lugar de Interés Comunitario, las joyas de la naturaleza de la UE, en Lanzarote y Fuerteventura. Además de ser una zona única por su riqueza en cetáceos.
Se trata de una amenaza global ante la que hay que plantarse. Porque se pondrán en peligro ecosistemas de gran valor ecológico. Porque se pondría en peligro el futuro económico de las zonas afectadas que se sustenta en los valores naturales que encierran.
Y como en otras tantas ocasiones, es preciso señalar quiénes son los responsables de que la ciudadanía canaria, balear, valenciana... haya alzado mayoritariamente su voz contra las prospecciones petrolíferas. No quieren que la española Repsol en Canarias y la escocesa Caim Energy en Baleares-Golfo de Valencia hipotequen su futuro. Y es de justicia que todo el mundo sepa quienes lo permiten y toleran: el Ministro Soria y la Ministra Tejerina, responsables de Industria y Medio Ambiente respectivamente.
Nos une a todos un objetivo común: Prospecciones NO. Ni aquí, Ni allí.
- Ayúdanos a recoger muchas voces en contra de las prospecciones petrolíferas. Tu firma importa
