Las estaciones de tren parecían recuperar la normalidad tras el apagón nacional. Sin embargo, este lunes los astros se han vuelto a alinear para hacer coincidir hasta tres incidentes que han provocado la paralización y el retraso de decenas de trenes y, de nuevo, numerosas aglomeraciones de viajeros en Atocha (Madrid), Santa Justa (Sevilla) o María Zambrano (Málaga).

En menos de 24 horas el sistema ferroviario español ha tenido que enfrentarse al "enganchón" de un tren Iryo que arrastró la catenaria, al robo de cable de cobre en hasta cinco puntos de la provincia de Toledo y a un fallo en el sistema de señalización en Almodóvar. Según comunicaba este lunes el presidente de Renfe, Álvaro Fernández de Heredia, solo las dos primeras incidencias afectaron en conjunto a al menos 10.700 viajeros y 30 trenes. La última, por su parte, generó retrasos de más de media hora en los trenes con destino Sevilla.

Las consecuencias de este 'lunes negro' del sistema ferroviario han sido mayores debido al contexto en el que se han producido. El ministro de Transportes, Óscar Puente, no ha dudado en tildar de "sabotaje" el robo de cable de cobre y lo ha justificado apuntando la elevada movilidad que se estaba produciendo durante el domingo debido a la operación 'regreso' del puente de mayo. Asimismo, una gran cantidad de personas intentaban llegar a Sevilla para dar comienzo a la Feria de Abril que empieza esta misma noche.

Cinco robos de cable de cobre

A primera hora de este lunes fuentes de Interior confirmaban que la Guardia Civil había abierto una investigación por el robo de cable de señalización (durante la noche del domingo) que el Ministerio de Transportes había localizado en cinco puntos de los municipios toledanos de Los Yébenes y Manzaneque en zonas de acceso a través de pistas forestales entre olivos.

El ministro de Transportes, Óscar Puente, ofreció varias claves de lo sucedido en una entrevista para la Cadena SER. Según el dirigente, la teoría del "sabotaje" cobraba sentido teniendo en cuenta que las zonas donde se robó el cable no contaban con cámaras de seguridad o que las vías estaban valladas en estos puntos y se tuvieron que romper o saltar para acceder a ellas: “Es lo que apuntan las primeras diligencias”, aseguraba.

“Son robos de cable de escasísimo valor en puntos distintos. Es una acción bastante coordinada (...) Quien lo hacía sabía perfectamente dónde iba, porque es una zona donde no hay cámaras. Además, el rédito económico que se obtiene de una operación de estas características es absolutamente despreciable frente al enorme daño que se causa”, sentenciaba.

El ministerio del Interior confirmó entonces que tanto la Guardia Civil como la Policía Nacional permanecerían en contacto constante con Adif para esclarecer lo ocurrido e identificar a los responsables. Ambos cuerpo recordaron que, en este sentido, desde hace años mantienen activo un plan especial de prevención del robo de cobre.

¿"Enganchón" del Iryo?

En paralelo a la investigación de los robos de cable de cobre, durante la mañana de este lunes también se ha intentado esclarecer el incidente del "enganchón" del Iryo. Y es que, mientras que el presidente de Renfe, Álvaro Fernández Heredia, y el ministro de Transportes, Óscar Puente, reiteraron durante todo el día que el primero de los 'problemas' técnicos se debió a este fallo de Iryo, desde la compañía privada niegan la mayor y aseguran que esto no sucedió y que el tren "estaba parado".

Sobre la una de la madrugada de este lunes, Fernández Heredia explicó a través de X que un tren de Iryo había tenido "un enganchón en la catenaria y es necesario su transbordo, remolque y la restitución de la catenaria para poder restablecer la circulación". Sin dudarlo, apuntó directamente que "esta" era "la causa de los trenes que se han quedado sin energía".

En la misma línea, Puente destacó que dicho convoy "se quedó parado y lo tuvimos que trasbordar, tuvimos que sacar otro tren Iryo desde Atocha, apartarlo de la vía y reanudar la marcha", señalaba: "A una incidencia se sumó la otra y hemos tenido esta terrible vuelta del puente", resumió en otra de sus intervenciones públicas.

Sin embargo, la compañía italiana no tardó en negar rotundamente que uno de sus trenes se enganchara con la catenaria y empeorase así el caos desatado por el robo de cobre en la alta velocidad entre Madrid y Andalucía. Según Iryo, a las 21:30h su tren estaba parado en la Sagra por el robo de cables previo que ya estaba provocando la ralentización del tráfico. De esta manera, apuntaron que antes de reanudar la marcha ya se detectó la falta de tensión en la catenaria y esto obligó al convoy a permanecer detenido.

Con todo ello, el presidente de Renfe quiso aclara que no estaba "señalando a ninguna empresa": "Estas cosas suceden, el sistema ferroviario tiene un índice de fallos de este tipo", aseguraba mientras advertía que simplemente "la acumulación de estas dos incidencias tuvo un efecto multiplicador que han sufrido los viajeros esta noche".

Nuevo fallo en la señalización

A mediodía de este lunes, Adif, cuyos servicios jurídicos redactaron la pertinente denuncia por la sustracción de cable, informaba de que ya habían podido pasar varios trenes por los puntos de la incidencia y que, por fin, se podía circular en condiciones normales de explotación (la velocidad normal).

Sin embargo, cuando el sistema ferroviario parecía recuperar su ritmo habitual, una nueva incidencia, en este caso en los sistemas de señalización de la localidad cordobesa de Almodóvar del Río, afectó a los trenes de alta velocidad con origen y destino Sevilla provocando retrasos de más de media hora. Pese a ello, alrededor de las tres de la tarde Adif comunicó que la incidencia se había solucionado y que ya se había empezado a recuperar la normalidad.

Bronca política por los trenes

Ante todo lo acontecido este lunes el PP ha clamado contra el "caos ferroviario" que a su juicio demuestra el "grave" deterioro del sistema ferroviario y sus frecuentes problemas, y ha exigido al Gobierno una auditoría de la red ferroviaria y la comparecencia urgente de Óscar Puente, así como que se indemnice a todos los viajeros afectados por retrasos.

En reacción a estas declaraciones, el PSOE ha tildado al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, de "carroñero político" por decir que los incidentes ferroviarios están ofreciendo "imágenes impropias de la cuarta economía del euro".

Por su parte, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha pedido a su vez una "importante inversión" ante las incidencias ferroviarias que se suceden en la región y desde Madrid, la presidenta de esta Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, ha señalado que "lo que queda claro es que con este Gobierno nada funciona desde hace muchos años" y que "faltan reformas profundas, falta sentido de Estado".

Compensar a los afectados

Por último, la organización de consumidores OCU ha criticado también la falta de planes de contingencia para evitar incidencias ferroviarias como el robo de cableado, "una circunstancia que se repite con demasiada frecuencia", y ha reclamado compensaciones a los afectados.

Además, ha asegurado en un comunicado que estos robos no se están previniendo con la debida diligencia, por lo que deberían dejar de considerarse como una circunstancia extraordinaria. El hecho de que esté así considerado, según advierte la OCU, sólo permite a los afectados reclamar por la devolución del precio del billete y demandar una asistencia básica, algo que, además, tampoco recibieron los afectados la noche del domingo al lunes: "No recibieron refrigerios y alojamiento si tuvieron que dormir fuera".