Bruselas impone una nueva multa récord a Google de 4.343 millones por Android

Bruselas impone una nueva multa récord a Google de 4.343 millones por Android

Se trata de una sanción a la empresa por abuso de posición dominante con su sistema operativo .

REUTERS

La Comisión Europea (CE) ha impuesto este miércoles 18 de julio a Google una multa de 4.343 millones de euros por ejercer prácticas ilegales con su sistema operativo para teléfonos móviles Android con el fin de reforzar el dominio de su buscador. Se trata de la mayor sanción infligida en la historia del regulador comunitario.

"Google ha impuesto restricciones ilegales a los fabricantes de dispositivos Android y operadores de redes móviles para consolidar su posición de dominio en las búsquedas en internet", ha dicho el Ejecutivo comunitario en un comunicado.

La respuesta de Google no ha tardado en llegar y este mismo miércoles el gigante tecnológico ha manifestado su intención de recurrir a la multa. "Android ha creado más opciones para todo el mundo, no menos. Un ecosistema pujante, rápidas innovaciones y precios más bajos son distintivos clásicos de una fuerte competencia. Recurriremos la sentencia de la Comisión", ha dicho un portavoz.

Esta sanción se suma a la multa de 2.424 millones de euros que el Ejecutivo comunitario impuso al gigante estadounidense en junio de 2017 por abuso de dominio al favorecer a su servicio de comparación de compras en su motor de búsqueda, que hasta hoy constituía la más alta impuesta por Bruselas a una sola empresa.

La comisaria europea de Competencia, Margrethe Vestager, señaló que Google impone tres tipos de restricciones "para asegurar que el tráfico de los dispositivos Android va al motor de búsqueda" de la compañía, lo que a juicio de Bruselas "ha negado a los rivales la posibilidad de innovar y competir por sus méritos" y, a los consumidores, "los beneficios" de tal competencia.

En concreto, Bruselas alega que Google exigió a los fabricantes que preinstalasen sus servicios de búsqueda (Google Search) y su navegador (Chrome) como condición para otorgarles la licencia de uso de su tienda de aplicaciones (Play Store).

Google exigió a los fabricantes que preinstalasen sus servicios de búsqueda y su navegador como condición para otorgarles la licencia de uso de su tienda de aplicaciones.

Además, añade, hizo ciertos pagos a grandes fabricantes y operadores de redes móviles a condición de que instalasen por defecto su buscador, al tiempo que les impidió vender teléfonos inteligentes que tuviesen versiones alternativas de Android no aprobadas por Google.

Más de tres años después...

La investigación de la Comisión, que se inició en abril de 2015 y un año después, el 20 de abril de 2016, le llevó a acusar formalmente a la empresa, ha concluido que estas prácticas forman parte de una "estrategia" de Google para consolidar su posición dominante y violan las normas de Competencia europeas.

La decisión de la Comisión requiere al gigante estadounidense "poner fin a su conducta ilegal de forma efectiva en 90 días" a contar desde la decisión.

Google tiene que parar y no reincidir en ninguno de estos tres tipos de prácticas (...) y también abstenerse de cualquier medida que tenga un fin similar o equivalente a estas.

"Como mínimo Google tiene que parar y no reincidir en ninguno de estos tres tipos de prácticas (...) y también abstenerse de cualquier medida que tenga un fin similar o equivalente a estas", afirma la CE.

Bruselas recordó que Google desarrolla el sistema operativo y concede las licencias de uso de Android, que es utilizado en el 80% de los teléfonos inteligentes en Europa y el mundo.

Señaló además que la investigación ha concluido que el buscador domina en el mercado de servicios generales de búsqueda en internet en el Área Económica Europea, y a nivel mundial (salvo en China) en los de licencias de sistemas operativos para teléfonos móviles y tiendas de aplicaciones para Android, con más de un 90 % de cuota de mercado en todos ellos.

La decisión de la CE va dirigida a Google y a Alphabet, su matriz.