Los partidos echan el resto en el cierre de la campaña más convulsa

Democracia o fascismo. Echar o no a Sánchez. Regenerar o no Madrid. Libertad o todo lo demás.

La campaña más dividida y crispada de los últimos años toca a su fin. Los partidos han pedido el voto por última vez antes de que sean los madrileños los que dicten sentencia este martes 4 de mayo en las urnas.

Serán ellos quienes decidan si Ayuso sigue dos años más en la Puerta del Sol, sola o con la ultraderecha; o si es la izquierda, unida, la que logra arrebatarle al PP el poder en Madrid 26 años después.

Algunas encuestas hablan de victoria holgada de la derecha. Otras, las menos, hablan de que las cosas están muy ajustadas.

Por eso los partidos no han reparado en recursos y emociones. Los líderes nacionales han apoyado a sus candidatos en todos los cierres de campaña.

El primero en empezar ha sido el de uno de los dos candidatos a presidir la Comunidad de Madrid, Ángel Gabilondo, quien ha pedido participar tirando de su habitual y filosófica retórica. “Hay momentos en que uno no puede rechazar el desafío de verse enfrentado a tomar una decisión crucial para sí mismo y para los demás. Ese momento es ahora”, ha dicho.

Pese a iniciar esta campaña presentándose como “soso, serio y formal”, no ha podido evitar lanzar un par de recados con cierta sorna. Primero, a Beatriz Fanjul, la líder de las Nuevas Generaciones del PP, a la que ha agradecido que le haya “señalado el camino”. “Gracias por darnos esa luz. Nosotros somos lo bueno por conocer”, ha afirmado.

Después a la propia Ayuso, a la que ha criticado por no mencionar la pobreza ni la desigualdad durante su discurso durante el acto del 2 de mayo en la sede de la Comunidad. ”¿Qué idea de la realidad tiene? ¿Con quién habla?”, se ha preguntado.

Gabilondo ha estado escoltado por el presidente del Gobierno y líder del PSOE, Pedro Sánchez, que ha animado a votar a su formación advirtiendo de que el PP pactará con la ultraderecha si dan los números.

“El PP dice que no es el fin del mundo pactar con la ultraderecha. No es el fin del mundo, pero puede ser el principio del fin de una democracia vigorosa, rebosante de derechos y libertades en Madrid, que su presencia en el Gobierno pone en riesgo”, ha afirmado Sánchez.

A la hora que acababa el acto del PSOE comenzaba el del PP, en un Madrid Río abarrotado donde el secretario general del PP, Teodoro García Egea, y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, han repartido abrazos entre la multitud, algunos sin mascarilla, como el dj que amenizaba el acto.

Allí, la candidata, Isabel Díaz Ayuso, que ha estado acompañada del presidente del partido, Pablo Casado, aseguraba que “esta campaña es decisiva para España porque va a marcar un antes y un después”. “Cuando hablan de la confrontación con Pedro Sánchez, quiero dejar claro que el problema de Madrid es Pedro Sánchez, no es al revés”, ha dicho la dirigente madrileña, volviendo a situar la campaña en el debate nacional.

En su discurso, Ayuso ha sacado pecho de su gestión y de su confrontación con las directrices de los expertos del Gobierno central, algo muy aplaudido por su parroquia. “No queremos que cada vez dirigentes más opulentos y separados de los problemas nos digan hasta el último minuto cómo dirigir nuestras vidas”, ha dicho.

“Hoy, dos de mayo, tenemos otros adversarios comunes ante los que el pueblo español se ha levantado: el virus, la ruina y la pena”, ha proseguido Ayuso, quien ha hecho su particular definición de igualdad: “igualmente diferentes”.

Ayuso ha terminado su acto pidiendo a los madrileños “una amplia mayoría” para no depender de nadie y poder “tener un gobierno en libertad”.

Durante su discurso, la candidata del PP ha enviado un mensaje a Pablo Iglesias, a quien ha dicho, en alusión al único debate electoral, que ella sonríe porque no es de Podemos. “Sonrío porque soy libre”, ha agregado.

Iglesias, el inesperado candidato de estas elecciones, ha sido el último en cerrar su campaña. Unidas Podemos ha ido con todo a este último acto: Ada Colau, Irene Montero, Yolanda Domínguez...

Desde Vicálvaro, Iglesias ha advertido de que “la ultraderecha es el mecanismo del poder para cuestionar la democracia cuando los resultados no le son favorables” y ha advertido de que “ya están preparando el terreno” para “denunciar fraude electoral” en caso de que gane la izquierda.

“Les sobra la democracia si no ganan, por eso el día 4 tiene que haber una respuesta de orden, una respuesta política, porque ellos no necesitan de la política”, ha aseverado Iglesias.

El candidato de Unidas Podemos ha pedido disputar “el significado de la palabra libertad” a Ayuso y ha animado a formar “colas, colas, colas y colas interminables en los colegios electorales de las ciudades y pueblos de la clase trabajadora”.

También Mónica García, candidata de Más Madrid, ha querido rebatir el significado de la palabra libertad usado por Ayuso. “Una libertad hueca, nos quiere hacer creer que es pisar al prójimo y desentenderse de la sociedad en la que vivimos”, ha dicho en un acto al que ha acudido Íñigo Errejón, portavoz de Más País en el Congreso.

“Todo el día educando a nuestros hijos para que una señora nos diga que podemos hacer lo que nos dé la gana”, ha reprochado.

Frente a esto, García ha contrapuesto la herramienta de la “empatía”. “Porque nuestra suerte es la de los barrios y municipios del sur, nuestros miedos son los de los más vulnerables y nuestros anhelos, los de los más jóvenes”.

La candidata de Más Madrid ha animado a “llenar las urnas de lo mejor de nuestros antepasados y de lo mejor de nuestro futuro”. “Vamos a poner a latir Madrid de nuevo, vamos a cambiar su arrogancia por nuestra empatía”, ha concluido.

Por su parte, Edmundo Bal, candidato de Ciudadanos, ha cargado contra la izquierda por traer “la agenda del enfrentamiento” y ha animado a los votantes de su partido a ganar a Pablo Iglesias.

“Que nadie se quede en casa sin votar. Los moderados, los de centro, centroizquierda y centroderecha. Los que dialogáis, aquellos que abrazáis y sentís cariños y amor por vuestros compatriotas. Solo podéis votar una opción. Cs, un partido de concordia, moderación y centro”, ha afirmado Bal, cuyo acto ha tenido lugar en la céntrica plaza de la Villa de Madrid, donde ha estado arropado por la líder de la formación, Inés Arrimadas.

Allí, el candidato de Cs ha apostado por reeditar el “Gobierno de éxito” entre PP y Ciudadanos. Para ello, habrá que ver si la formación naranja logra hacerse con el 5% necesario para entrar en la Asamblea.

El partido de ultraderecha Vox, por su parte, ha cerrado su campaña en la plaza de Colón.