Eva Rivegan, una influencer vegana y nutricionista, ha publicado recientemente un vídeo yendo al supermercado y analizando las etiquetas de varias aceitunas industriales que se venden en España.

"Acompáñame, que te voy a demostrar cómo un producto superespañol y saludable hasta el tuétano lo han convertido en una verdadera mierda", comienza el vídeo en TikTok de la creadora de contenidos.

Mostrando la presencia de glutamato monosódico en prácticamente todas las aceitunas presentes en el supermercado, la nutricionista ha explicado que "estudios científicos han relacionado el consumo excesivo de glutamato monosódico con síntomas con dolor de cabeza, náuseas, sudoración y palpitaciones en ciertas personas. Una reacción conocida como el síndrome del restaurante chino".

"El potenciador de sabor también denominado E621 o glutamato monosódico puede generar una adicción al sabor intenso, lo que lleva a una preferencia por alimentos altamente procesados y poco saludables", ha añadido Eva Rivegan.

La nutricionista ha asegurado que "la industria sabe perfectamente lo que hace. Añadir potenciadores del sabor a los alimentos tiene un doble beneficio para ellos. Por un lado, el glutamato monosódico o umami es tremendamente económico y, por otro, se están asegurando de que consumas más cantidad".

En Francia se han hecho eco de este problema de las aceitunas españolas denunciado por Eva Rivegan. El medio de comunicación Top Santé ha publicado un artículo titulado Una nutricionista se pronuncia contra varias marcas de aceitunas que se venden en los supermercados: contienen un aditivo problemático en el que se hace referencia al vídeo de la creadora de contenido.