Una influyente revista de EEUU pinta de una forma tremenda a Sánchez en su portada: impacta verlo
Y le dedica un demoledor artículo.
La influyente revista estadounidense Politico ha dedicado su portada a Pedro Sánchez, al que ha colocado con pintadas como diablo y payaso. Además, afirma en esa primera plana que los socialistas españoles tienen "un problema".
En el artículo, la publicación señala que en España "el crecimiento es alto" y "el desempleo es bajo" y se pregunta por qué entonces "el presidente del Gobierno español es un lastre" electoral "en ciudades como Sevilla".
Politico destaca que Sánchez "es muy impopular" y eso puede perjudicar a los candidatos del PSOE en determinadas ciudades o comunidades autónomas en las elecciones del próximo domingo.
Y, siguiendo con el ejemplo de Sevilla, en el artículo se explica que "el problema" para el candidato socialista es que "cuando los sevillanos se dirijan a las urnas, harán su elección basándose no solo en su desempeño, sino también en la reputación de su partido".
Y recoge las palabras de Pablo Simón, politólogo de la Universidad Carlos III de Madrid: "Las encuestas sugieren que tres de cada cuatro españoles pretenden basar su voto en asuntos locales, pero una cuarta parte admite que su voto dependerá de asuntos nacionales".
"Eso es problemático para algunos alcaldes porque Sánchez es una figura muy polarizadora", añade el experto.
Con todo, Politico destaca que "la administración de Sánchez parece haber capeado bien la tormenta" provocada por situaciones como la guerra en Ucrania o la pandemia de coronavirus.
"Y, sin embargo, dentro de España, la percepción del gobierno es negativa, y todos los partidos de la coalición gobernante han sufrido una fuerte caída en las encuestas. Desde mayo del año pasado, los socialistas de Sánchez han ido a la zaga del conservador Partido Popular del país, que actualmente está 7 puntos porcentuales por delante", destaca.
Al hilo de eso, Simón señala "que algunos españoles desconfían de Sánchez por haber entrado en un gobierno de coalición con partidos de extrema izquierda con los que dijo que nunca gobernaría".
