Marlaska dice que la Guardia Civil actuó con "proporcionalidad" con los migrantes en Melilla

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha salido en defensa de la actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en la valla de Melilla al asegurar que siempre aplican los márgenes de la proporcionalidad y el principio de legalidad.

Lo ha hecho preguntado por la actuación de la Guardia Civil y más concretamente por el vídeo que captó RTVE en Melilla en el que se ve cómo un migrante desarmado es recibido a porrazos por unos siete agentes, que no dudan en golpearle y rociarle con un espray.

Una actuación que ha provocado la respuesta del Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, quien ha reclamado información sobre lo sucedido.

Marlaska ha asegurado que no tiene ningún problema en atender la petición del Defensor del Pueblo para informar sobre la actuación en la valla con uno de los inmigrantes. El ministro ha recordado que en todo Estado de Derecho, las actuaciones de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, al igual que las de todos los funcionarios públicos, son objeto de una continua evaluación.

“No es que no tengamos inconveniente. Es nuestra obligación y nuestro deber. Tenemos unas Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que actúan en parámetros de proporcionalidad y necesidad para garantizar la libertad y la seguridad de todos, y también la seguridad de nuestras fronteras”, ha dejado claro el ministro del Interior.

Eso sí, Marlaska ha apostillado que “no se puede admitir el uso de la violencia respecto a las fronteras”, que ha recordado que son de la Unión Europea, y “no se puede permitir la agresión a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en un Estado de Derecho”.

Ha recordado que, durante los dos saltos a la valla, en los que participaron un total de 3.700 inmigrantes, más de 50 agentes de la Guardia Civil y la Policía Nacional “han sido violentamente agredidos” y “hay pruebas materiales de ese extremo”.

Entre ellos, hay heridos de distinta entidad y esas lesiones “podrían haber sido de mayor gravedad”, ha aseverado Grande-Marlaska, según el cual los dos saltos fueron “extremadamente violentos”, con una organización y violencia “que no se había visto en otras ocasiones”.