Cuatro miembros del grupo ultra Proud Boys, culpables de conspiración sediciosa por el asalto al Capitolio de EEUU

Cuatro miembros del grupo ultra Proud Boys, culpables de conspiración sediciosa por el asalto al Capitolio de EEUU

Entre ellos el expresidente Henry "Enrique" Tarrio.

Uno de los miembros de Proud Boys posa orgulloso el día del asalto al CapitolioNathan Howard / Getty Images

Cuatro miembros del grupo extremista Proud Boys han sido hallados culpables del cargo de 'conspiración sediciosa' por alentar y participar en el asalto al Capitolio de EEUU el 6 de enero de 2021. Entre los acusados está el expresidente, Henry "Enrique" Tarrio.

Además de Tarrio han sido inculpados Ethan Nordean, Joseph Biggs y Zachary Rehl a unos cargos que pueden conllevar hasta 20 años de prisión. No es el único delito que se les imputa, ya que el jurado incluye la obstrucción de un procedimiento oficial, que igualmente podría suponer hasta 20 años, junto a otros cargos de menor relevancia penal.

La causa se ha desarrollado durante casi cuatro meses, el más largo de todas las causas abiertas tras el asalto, en la que los fiscales señalaron cómo este grupo ultra neofascista se consideraba el "ejército" de Donald Trump. 

El abogado de Tarrio, Nayib Hassan, acusó a los fiscales y al propio expresidente republicano de "querer usar a Enrique Tarrio como chivo expiatorio de para Trump y quienes están en el poder".

De los cinco miembros acusados, todos menos Tarrio entraron al Capitolio a la fuerza y se les considera responsables de ser los primeros en saltarse el perímetro de seguridad. Los fiscales han detallado que Tarrio no estaba en Washington ese día, pero que sí ayudó a dirigir el ataque desde Baltimore, donde permanecía tras una sanción inmediatamente anterior que le prohibía estar en la capital el 6 de enero.

Bajo su mandato, llamando a las revueltas contra el resultado de las presidenciales de 2020, los miembros de Proud Boys irrumpieron en la sede de la democracia estadounidense, dando pie a unos disturbios que conmocionaron al mundo y dejaron cinco muertos, uno de ellos un policía, además de cientos de heridos (más de 140 agentes entre ellos).

Hasta el momento, más de 500 personas se han declarado culpables de los cargos presentados por el Departamento de Justicia y otras 80 han sido ya condenadas durante los juicios. Entre ellos se incluye al fundador del grupo ultraderechista y paramilitar Oath Keepers, Stewart Rhodes.