El Estado Islámico reivindica los atentados en Irán que dejaron 84 muertos y casi 300 heridos
Tuvieron lugar en pleno homenaje y cerca de la tumba del teniente general iraní Qassem Soleimani. En un mensaje donde amenaza a Occidente, el ISIS también reclama a Hamás no colaborar con grupos como Hezbolá o regímenes como Irán.
El Estado Islámico ha reivindicado su autoría en el doble atentado que causó al menos 84 muertos y cerca de 300 heridos en Irán, en pleno homenaje al teniente general Qassem Soleimani. La figura de este militar iraní, asesinado por EEUU en 2020, es vista como un martir del régimen y por ello el homenaje congregó a miles de personas.
A través de sus redes, el grupo terrorista ha reconocido que dos de sus miembros "se dirigieron hacia una gran concentración" cerca de la tumba de Soleimaní en Kerman (Irán) e "hicieron detonar sus cinturones explosivos", lo que provocó la matanza.
Aunque en un principio se sospechó de una doble detonación a distancia, finalmente las autoridades iraníes confirmaron la naturaleza suicida de unos ataques que dejan 84 muertos y 284 heridos tras la última actualización oficial.
El ISIS ha identificado a sus dos atacantes suicidas como Omar al Mowhid y Saifalá al Muyahid, que cometieron el atentado para que "los politeístas sepan que los yihadistas están detrás suyo y de sus proyectos", de acuerdo con el comunicado difundido en su canal de Telegram.
Recomiendan atentar contra objetivos "fáciles" y "civiles" en EEUU y Europa
La confesión de este grupo terrorista ha llegado junto a un mensaje de uno de sus portavoces, Abu Hudhaifa al Ansari, donde llaman a asesinar judíos y cristianos, tanto en Estados Unidos como en Europa, en represalia por la ofensiva militar lanzada por Israel sobre Gaza.
El portavoz del ISIS , llama a los "leones del islam" a perseguir a "judíos, cristianos y sus aliados en las calles de Estados Unidos, Europa y el mundo", y recomienda atentar contra "objetivos fáciles" y preferiblemente "civiles", lo que incluye también centros religiosos "como sinagogas e iglesias".
Pero el mensaje del Estado Islámico también tiene una clave regional. En la grabación reclaman a Hamás que no colabore con organizaciones chiíes, consideradas herejes para esta organización yihadista suní. Esto excluiría al grupo islamista libanés Hezbolá pero también al régimen de Irán, que ya ha mostrado su apoyo a Hamás.
Hasta ahora, el país no había querido pronunciarse sobre la autoría de la matanza. La Guardia Revolucionaria iraní apenas se limitó a señalar que fue una acción de "enemigos" que quieren vengarse de la veneración que profesan los ciudadanos hacia Soleimani. Así, abogan por seguir "combatiendo el terrorismo", avisando de que el atentado "sólo reforzará la unidad y la coherencia frente a la adversidad".
