Rusia podría estar moviendo ficha de forma preocupante. Ese es el anuncio que varios funcionarios de inteligencia occidentales compartieron recientemente tras detectar movimientos inusuales muy cerca de la frontera entre Rusia y Finlandia.

Según informaron, y de acuerdo con lo recoge el Wall Street Jorunal, la apertura de bases militares y movilización de militares a las puertas de Finlandia -con la que Rusia comparte 1.300 km de frontera-, podría responder al interés de Moscú por expandir el conflicto a territorio OTAN en un futuro próximo.

Así, los principales movimientos que se han detectado por parte de Rusia se centran en la expansión de bases militares a unos 160km del este de Finlandia, que podría traducirse en la apertura de nuevas bases militares a las que enviar miles de tropas, según expuso el medio mencionado citando fuentes de funcionarios occidentales.

Pero este anuncio no es algo nuevo. De hecho es una de las advertencias que más veces han repetido los representantes de la OTAN desde el estallido de la guerra en Ucrania. Incluida Finlandia, país que se unió a la OTAN en 2023 y ve peligrar su soberanía por las acciones rusas.

Además, durante los últimos meses, Moscú ha enviado a Ucrania militares procedentes de estas bases cercanas a Finlandia, por lo que se puede decir que el despliegue ruso en el país nórdico puede ser de suma importancia para las aspiraciones rusas tanto en Ucrania como en futuros conflictos con la OTAN.

Esta teoría refuerza las palabras de Christopher Cavoli, comandante de las fuerzas estadounidenses, que ya alertó de que Rusia estaría reconstruyendo sus fuerzas muchos más rápido de lo que se podía esperar. "A pesar de las extensas pérdidas en el campo de batalla en Ucrania, el ejército ruso se está reconstruyendo y creciendo a un ritmo más rápido del que la mayoría de los analistas había anticipado", afirmó Cavoli.

Esto se traducirá, según el experto, en la producción de 250.000 proyectiles rusos al mes. O lo que es lo mismo: la capacidad para tener un arsenal tres veces mayora que el de EEUU y Europa. juntos. Y todas estas teorías podrían no ir desencaminadas. Más si cabe, si se recuerdan las declaraciones del ministro de Defensa ruso, Andréi Belousov, quien afirmó que Rusia debe estar preparada para un posible conflicto con la OTAN en la próxima década.

Por todos estos motivos, la OTAN ya ha intensificado sus preparativos -concretamente los países más cercanos a Rusia- para contrarrestar un hipotético ataque ruso. Algunos países como Polonia o los Bálticos, están ahora reforzando sus fronteras con Rusia y Bielorrusia y aumentando su gasto en defensa.

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