La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas ha determinado que Rusia recurrió a ataques químicos contra Ucrania de forma masiva. El Estado Mayor ucraniano ha detallado haber sufrido hasta 888 ataques con armas químicas sólo en el mes de mayo.

En un informe reciente, el tercero desde que comenzó la invasión rusa, el organismo internacional se hace eco del uso masivo del gas CS, clorobenzilideno malononitrilo, y conocido habitualmente como 'gas lacrimógeno'. 

Se trata de un gas no letal y utilizado en numerosas ocasiones en escenarios antidisturbios, pero no está permitido su uso en contextos de guerra. Específicamente, en las granadas que Rusia ha lanzado de forma masiva contra Ucrania, según el texto de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas citado por Ukrinform.

Este organismo, premiado con el Nobel de la Paz en 2013, señala en su informe que "Rusia utiliza sistemáticamente gases lacrimógenos, clasificados como agentes antidisturbios, en combate, lo cual está explícitamente prohibido como método de guerra según el derecho internacional".

El Estado Mayor de Ucrania confirma que la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas viajó recientemente dos veces al frente cerca de la región de Dnipropetrovsk.  Allí recibieron documentación y archivos digitales, tomaron declaración a testigos y recibieron dos granadas, dos muestras de suelo y vegetación, y los restos de un dron FPV para su análisis.

El director de la Organización, Fernando Arias González, ha exigido el cumplimiento estricto de la Convención sobre Armas Químicas, alertando de los peligros de utilizar este tipo de armamento en el frente.