Tras 6 años y medio de litigios y una guerra judicial que parecía que se alargaría hasta el infinito, finalmente todo ha llegado a su fin de la mejor manera. Hablamos de un caso que incumbe al proveedor Navantia y al Ministerio de Defensa de Noruega y se remonta al año 2018.

Los hechos ocurrieron el 8 de noviembre de 2018, cuando una fragata KNM Helge Ingstad de la armada noruega colisionó en la bahía de Bergen con un petrolero maltés, con la terrible consecuencia de hundirse posteriormente.

Tras ello, Noruega exigió responsabilidades a Navantia, lo que derivó en un tedioso proceso judicial durante meses, con una demanda de Noruega contra la compañía, por la cual le exigían 1.100 millones de euros.

Sin embargo, ambas partes han optado por la vía amistosa, y han decidido llegar a un acuerdo por el cual renovarán los servicios de asistencia técnica que ya prestaba desde hace cuatro años. Según informaron, Navantia aplicará un descuento de hasta 47,5 millones de euros por cada uno de los trabajos de reparación de las cuatro fragatas que construyeron para la armada noruega.

Así, Navantia señala que "el acuerdo se basa en una transferencia de valor en forma de descuentos en trabajos que serán realizados por Navantia para apoyo al ciclo de vida y actualizaciones de la fragatas clase F310", durante el tiempo de vigencia de los servicios de mantenimiento.

En Navantia se muestran "satisfechos de haber alcanzado un acuerdo que pone fin a este caso y amplía nuestro colaboración con Noruega", tal y como explicó el presidente de la compañía a través  de un comunicado, Ricardo Domínguez.

Por último, desde el Ministerio de Defensa de Noruega señalan que es una buena noticia que todo "se haya resuelto mediante una solución amistosa", y destacan que Navantia haya sido "durante varias décadas y seguirá siendo un proveedor importante del sector de defensa noruego".