Un experto alerta de la cantidad de soldados que necesitará Europa si EEUU lleva a cabo su temida traición
Reemplazar la ayuda estadounidense con fuerzas europeas será una ardua tarea.
La posible retirada las fuerzas estadounidenses de Europa ha suscitado la preocupación entre todos los países del continente por el vacío de poder militar que dejaría, poniendo en peligro la seguridad y estabilidad de la región, especialmente en los píses bálticos, que se encuentran cerca de la amenaza rusa.
Para hacer frente a esta situación sin la presencia estadounidense, Europa necesitaría hasta 300.000 soldados adicionales, calcula un reciente informe elaborado por expertos belgas y alemanes. Actualmente, EEUU podría aportar rápidamente hasta 100.000 soldados y 200.000 tanques en caso de conflicto en el Viejo Continente.
Reemplazar estas cifras con fuerzas europeas resultaría muy complicado. Si bien Europa cuenta con más soldados activos que Rusia, 1,4 millones frente a 700.000, la falta de cohesión y coordinación entre los ejércitos de los 29 países europeos, que no comparten una estructura unificada, dificulta la tarea.
"Los países del sur de Europa miran más hacia el Mediterráneo, mientras que los países de Europa del Este están más preocupados por la amenaza que representa Rusia", dice a Yle Niklas Helwig, investigador del Instituto Finlandés de Asuntos Internacionales.
Mejor equipamiento y más dinero
Además de aumentar el número de tropas, Europa debería mejorar significativamente su equipamiento militar. Para defender los países bálticos, se necesitarían más de 1.400 tanques, miles de vehículos de combate, artillería y millones de municiones. El desafío radica en que muchos ejércitos nacionales europeos operan con equipos incompatibles, lo que genera ineficiencias y costos elevados.
Los expertos sugieren que la cooperación y los pedidos conjuntos de armas serían una solución más económica, pero esto requeriría una profunda reforma en los sistemas de defensa de los países europeos.
El informe también señala que Europa debería incrementar su gasto militar en unos 250.000 millones de euros, llevando el presupuesto de defensa a más del 3,5% del PIB. A pesar de que Europa ya gasta más en defensa que Rusia, este aumento es esencial para mantener una disuasión efectiva ante la creciente amenaza de Moscú.
