Teresa, una sevillana de 29 años amante del rap español, y Juanma, un funerario granadino de lo más alegre, protagonizaron una escena de lo más subida de tono y con un ingrediente sin precedentes en First Dates: todo sucedió sin que ambos se hubieran visto.
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Un antifaz cubría el rostro de ambos, que comenzaron a palparse, a rozarse, hasta que finalmente comenzaron a besarse apasionadamente sin poderse separar el uno del otro.
- Teresa. Te voy a palpar.
- Juanma. Mira qué cara más finilla tienes.
Y esas fueron las últimas palabras antes de una retahíla de morreos de lo más ardientes:
"Nunca me había pasado en la vida de besar a un chico sin verlo, pero me sentía tan cómodo con él, que nos hemos dado un besito, y otro...", reconocía ante la cámara Teresa.
Y con esos ingredientes, y aún a ciegas, ambos afrontaron la sentencia final: Juanma no dudó de que tendría una segunda cita con Teresa: "Me ha gustado bastante".
Teresa hizo lo propio: "Tendría una segunda cita para seguir conociéndole".
Entonces llegó el momento de la verdad. Ambos se retiraron el antifaz y... ¡wow! ¡Quedaron encantados el uno con el otro!
- Teresa. ¡Hola!
- Juanma. ¿Qué pasa?
"Es más guapo de lo que me imaginaba", reconoció Teresa, que agarró a su cita y se la llevó encantada de la vida.