Multan a Adecco por excluir a trabajadores negros de ofertas de trabajo
Dos directores de una oficina que la empresa de trabajo temporal tiene en París crearon hace 22 años un registro de empleados basado en el color de su piel.
Antes de que los algoritmos, con sus sesgos raciales y de géneros, se encargasen de realizar el primer filtrado de los curriculum vitae que reciben los departamentos de Recursos Humanos en las empresas cuando se publica una oferta de empleo, o de que la Inteligencia Artificial irrumpiese en nuestras vidas, amenazando con destruir casi un tercio de los puestos de trabajo que conocemos, dos directivos de una oficina de empleo de Adecco ubicada en París crearon su propio sistema de selección de trabajadores, pero con un grave problema: se basaba en la nacionalidad, etnia o color de piel del aspirante.
Veintidós años después de que un becario de Adecco denunciase las prácticas que se llevaban a cabo en la oficina que tiene al compañía de trabajo temporal en el barrio parisino de Montparnasse, un tribunal ha condenado al grupo franco- suizo a pagar una multa de 50.000 euros por considerar probada "la existencia de un registro étnico de trabajadores" que utilizaban para excluirlos en determinadas ofertas de trabajo. Según el portal France Info, cerca de 500 trabajadores negros se vieron afectados por este registro y, entre 1997 y 2001, no pudieron acceder a empleos vinculados a la hostelería.
La investigación, según el citado medio, describe cómo los ex directivos de la sucursal de Adecco en París habían creado un sistema de discriminación en el que el encargado de la contratación de trabajadores, asignaba un código a cada aspirante para describir su apariencia física: PR1 para los demandantes de empleo que tuviesen una "muy buena presentación física y oral"; PR2 para los de "presencia física normal"; PR3 para los que no entran en ninguna definición y PR4 para "las personas negras" que buscaban un trabajo.
Tras un largo procedimiento judicial de más de 22 años, las asociaciones La Maison des Potes y SOS Racisme, que defienden a los denunciantes, han logrado que se reconozca la existencia de un "filtrado basado en el color de la piel" sin que ninguno de los directivos implicados "pusiese algún medio para ponerle fin", según explica la sentencia judicial hecha pública esta semana en Francia y que recoge France Info. En la misma se condena también a Olivier P. y Mathieu C., los responsables de la oficina de empleo temporal por aquel entonces, a pagar una multa de 10.000 euros.
Las asociaciones consideran que la sanción impuesta a Adecco es insuficiente y también lamentan que el proceso judicial se haya extendido tanto: "Hay víctimas que han muerto. Así que son sus viudas y sus hijos los que reclamarán sus indemnizaciones", explican al citado medio. En declaraciones recogidas por la Agencia France Press, la compañía de trabajo temporal asegura que toma nota de la sentencia y asegura que su compromiso contra la discriminación es real desde hace muchos años.
