Digamos SÍ a la ciencia

Cuando mi hijo pequeño me dijo que quería ser científico sentí una profunda satisfacción, pero al mismo tiempo me preocupaban las dificultades que se iba a encontrar en este país.

Hace años que España tiene científicos y científicas brillantes, que aportan conocimiento en múltiples ámbitos y son referentes mundiales. A pesar de esto, el personal científico se ha visto tradicionalmente maltratado. Las investigadoras e investigadores se vieron expulsados durante la década perdida del PP y solo se vieron apoyados por su propia vocación.

Ahora es el momento de darles una oportunidad digna de retorno, es el momento de estabilizar la carrera profesional, es el momento de una financiación creciente y estable.

Somos conscientes de la importancia de la ciencia como trampolín social, económico y de conocimiento. Y por ello tenemos claro que se tiene que apostar de manera decidida por la ciencia y la modificación de la ley de la ciencia es clave para revertir muchos de los problemas endémicos en nuestro país. Por todo ello, decimos sí a esta ley.

Una vez más, los y las socialistas apostamos por la ciencia, apostamos por el personal científico, apostamos por la estabilidad y la dignidad laboral y apostamos por la transferencia de conocimiento.

La ciencia y el personal científico nos ha demostrado recientemente, y una vez más, lo importante que es la investigación para nuestro país. Ellos y ellas han hecho una apuesta laboral y muchas veces incluso personal para el avance social. Ya es hora de que desde el legislativo le demos herramientas para dignificar la carrera profesional y que dotemos a la ciencia de una financiación creciente y justa.

Esta ley es una ley de todos y todas, del Gobierno, de muchos grupos parlamentarios y de las asociaciones y entidades científicas. Y, sobre todo, será una ley para y por los científicos y científicas de este país.

Por lo que ¿quién puede votar en contra de dignificar la carrera científica? ¿Quién puede votar en contra de una financiación pública creciente y estable en I+D+I? Pensamos que nadie, pero siempre hay algún grupo que nos puede sorprender.

Porque esta ley apuesta por la carrera científica estable y digna, la reducción de la carga administrativa, la transferencia de conocimiento y alcanzar la igualdad efectiva, por todo esto es una buena ley para el personal científico.

Las personas que nos dedicamos a la política tenemos que ser una herramienta útil para la sociedad. Estamos obligados y obligadas a hacer política útil para las personas. Aprobemos leyes que mejoren la vida de los científicos y científicas de nuestro país. Por lo tanto, digamos sí a esta ley, digamos sí a la Ciencia.