Arde en llamas la aguja de la catedral de Rouen (Francia)

Francia está reviviendo sus peores pesadillas desde que la catedral parisina de Notre Dame registró un incendio que acabó con su cubierta en la primavera de 2019. La aguja de la catedral gótica de la ciudad francesa de Rouen, la capital de Normandía, comenzó a arder en llamas este jueves según comenzaron a mostrar las imágenes de televisión y ha confirmado el regidor de la capital de dicha región gala. 

Los bomberos lucharon contra el fuego y en el humo que se veía salir de la silueta de la aguja dejó de ser tan denso como en los primeros momentos -ha continuado viéndose salir humo blanco de entre los andamios, lo que ya indicaba que habían logrado apagar el foco de llamas-. Este elemento representativo del estilo gótico está en parte oculto por el andamiaje necesario, puesto que estaba siendo sometido de las tareas de restauración.

Lo cierto es que este suceso recuerda en gran medida a lo acontecido en la catedral más icónica de la capital francesa en abril de hace un lustro, puesto que la cubierta se incendió y el fuego acabó devorando su icónica aguja en unas imágenes históricas retransmitidas en tiempo real en las que el mundo pudo contemplar el desastre.

"Se ha iniciado un incendio en la flecha de la catedral de Ruán. El origen se desconoce por el momento. Todos los recursos públicos están movilizados", advirtió en X -antes Twitter- el alcalde de la ciudad, Nicolas Mayer-Rossignol.

Los bomberos logran controlar las llamas: posible causa, una chispa de soldadura

Afortunadamente, los profesionales de los equipos de extinción y seguridad lograron controlar las llamas cerca de las dos de la tarde. "El incendio está controlado", señaló la prefectura del departamento de Sena Marítimo, en un mensaje en redes sociales en el que añadió que los bomberos están realizando "una vigilancia activa del edificio".

Cabe destacar también que se ha llamado a filas a "equipos especializados" en el análisis del patrimonio y obras de arte para determinar si el incendio o el agua empleada en su extinción han podido causar daños, indicó en declaraciones a la prensa el prefecto (delegado del Gobierno central) del departamento, Jean Benoit Albertini. 

La principal hipótesis que se maneja sobre la causa pasa por una chispa de soldadura que habría saltado a los plásticos de protección de la zona de obras y se habría propagado, si bien la actuación fue muy veloz gracias a que los obreros dieron rápidamente la voz de alarma. También es necesario destacar el despliegue de medidas preventivas como la realizada con un total de 28 obras de arte que fueron retiradas para su protección.

Más que una catedral, joya del gótico galo, retratada por el inmortal pincel de Monet y ya víctima de otros fuegos

Cabe destacar que Nuestra Señora de Rouen no es una catedral cualquiera, si es que acaso un edificio de este tipo no les de por sí. Representa una de las joyas del gótico francés, concretamente del gótico flamígero -tardogótico-,  aunque como es habitual en este tipo de construcciones, sus orígenes se remontan a la Alta Edad Media. 

Cabe recordar que la anterior catedral, románica, fue calcinada por un incendio en el año 1.200 d.C. abriendo la puerta a que se erigiese la gótica. De hecho, ocurrió lo mismo con su aguja, la actual es de hierro fundido, pero la anterior, que data de 1540, era de madera recubierta de plomo. 

Fue pasto de las llamas al caerle un rayo en 1822, por eso se reconstruyó en hierro. Sin embargo, estuvo a punto de volver a desaparecer en 1944, en plena Segunda Guerra Mundial, fruto de los bombardeos de los aliados que trataban de liberar Francia del régimen de Vichy alineado con los nazis. Uno de los pilares del cimborrio -la base de una cúpula o torre, similar al tambor- fue destruido, pero el conjunto, que alcanza los 151 metros de altura, se mantuvo en pie.

Ha tenido un papel capital a lo largo de la historia, tanto que en su palacio arzobispal fue donde tuvo lugar el segundo y definitivo juicio a Juana de Arco, patrona del país vecino. Además, en su interior se guarda un tesoro muy importante para la cristiandad, el considerado como el corazón de Ricardo 'Corazón de León', el monarca inglés Ricardo I -sí, el de Robin Hood-.

También es emblema de otro estilo que consagró el arte francés, el impresionismo, de la mano de su creador, el pintor Jean Claude Monet. En sus infinitas series, el hombre que inició esa corriente pictórica retrató decenas de veces la catedral, buscando capturar hasta la mínima variación de la luz.