Ábalos abraza al Grupo Mixto para romper con Sánchez

Ábalos abraza al Grupo Mixto para romper con Sánchez

El exministro ya es diputado del Grupo Mixto y espera volver para "que quienes ahora pretenden" echarle "a la calle por la puerta de atrás" tengan que mirarle "a la cara".

El exministro José Luis Ábalos, durante la rueda de prensa que ha ofrecido este martes en el Congreso.EFE

"Me enfrento a todo: Vengo solo en mi coche, no tengo secretaria, no tengo a nadie detrás ni al lado. Me enfrento a todo el poder político, de una parte y de otra, y lo tengo que hacer solo". Con esta frase ha puesto el punto y coma el ya diputado del Grupo Mixto José Luis Ábalos tras su expulsión del Grupo Parlamentario Socialista. Al más puro estilo Frank Underwood en House of Cards, ha plantado cara al que ha sido su partido en una de las comparecencias más incendiarias que se han realizado desde el Congreso de los Diputados.

Hay Ábalos para rato. Ya este pasado viernes, quienes le conocen bien en el PSOE de Valencia dudaban de su salida de la política, sin ser capaces de ver que una de las personas más influyentes en la federación mediterránea iba a acabar unos días después suspendido cautelarmente de militancia. 

Una crisis de la que Ábalos quiere que sea el fin de su carrera política. "No puedo acabar mi carrera política y mi trayectoria como un corrupto cuando soy inocente (...) No estoy acusado de nada, ni formo parte de la investigación en curso (...) Si renunciara se interpretaría como un signo de culpabilidad, solo provocaría mi estigmatización, no ya política, sino personal", indicaba tratando de que no se rompa la imagen de ‘hombre todoterreno’, enormemente ambicioso y con destacables habilidades para desenvolverse frente a las cámaras.

No todo el PSOE está con Sánchez, tal y como indicaban las fuentes. Aparte de su equipo, que profesa una gran lealtad hacia él, hay diputados que no entienden los gestos del partido cuando otros, que tampoco figuran en ninguna investigación en curso, sí han tenido el amparo del partido y han capeado las feroces críticas de la oposición y los medios de comunicación.

“Entiende que la política consiste en la lealtad. Tiene a gente muy leal y profesa mucha lealtad a los suyos. Siempre está ahí, aunque su influencia sea mayor o peor. Los suyos cuidan muy bien de él y él cuida muy bien de los suyos. Igual me equivoco, pero no pasará nada. Lo veremos en el congreso del PSPV ahora con Diana Morant donde exigirá su cuota, aunque decrezca de un 45% a un 10%, con gente como el alcalde de Almussafes, Toni González”, explican las citadas fuentes, sin olvidar a Álvaro Soler, su candidato como barón y llamado a ocupar un puesto relevante bajo la batuta de la ministra de Ciencia en la federación valenciana.

¿El objetivo? Limpiar su "honorabilidad" con un dardo al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez al que aupó. El ya diputado del Mixto quiere "asistir al final de esta partida". "Obligando a que quienes ahora pretenden echarme a la calle por la puerta de atrás tengan que mirarme a la cara a mí y a muchos compañeros del partido, que me animan a seguir adelante", agregaba no solo en referencia a Sánchez sino a su núcleo duro como Santos Cerdán o María Jesús Montero. "Me hubiera gustado tener el beneficio del compañerismo", resumía el diputado lamentando acabar fuera del PSOE: "Nunca me hubiera imaginado fuera de estas siglas, a las que he entregado mi vida desde muy joven".

Paradojas de la política, compartirá ahora en el Grupo Mixto filas con viejas conocidas. Junto a él estará la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, que encontró acomodo en el grupo que acoge a diputados que no pueden formar grupo propio. Juntos negociaron en diciembre de 2019 el primer gobierno de coalición de la democracia entre el PSOE y Unidas Podemos. También compartirá escaño con el diputado del BNG Néstor Rego, que aseguraba con retranca este mismo martes que en el Mixto están "completos". No es para menos, el Grupo Mixto tiene entre sus filas a Podemos con 4 escaños y con uno a BNG, UPN y Coalición Canaria. Ahora, tendrán que hacer acomodo al diputado, que ya figura como miembro del Grupo. 

La aritmética parlamentaria también cambia. En una legislatura donde cada voto cuenta, tras la expulsión de Ábalos del PSOE, las sumas entre los socios de Gobierno, ERC, EH Bildu, PNV, Podemos y BNG suman 170. PP, Vox y UPN, 171. Tan solo los votos de Junts, con siete escaños, Ábalos, y el de Coalición Canaria decantan la balanza. "Soy un mero peón que se inserta en una lucha política sin reglas", indicaba Ábalos sin aclarar si votará como el PSOE pese a la purga o bien, en asuntos en los que se ha mostrado más discrepante con el partido, romperá la disciplina de voto.

El costurero del PSOE que aupó a Sánchez

"Es más, --ha abundado-- creo firmemente que, tras haber contribuido a la conformación de un Gobierno progresista tras la moción de censura de 2018, tras haber servido a la transformación y haber servido a nuestro país como ministro de España y habiendo ayudado como secretario de organización del PSOE a cohesionar a la militancia en un tiempo político muy complejo tras las primarias de 2017, me hubiera gustado tener el beneficio del compañerismo".

Ábalos ha querido reivindicar en la que ha sido su despedida del PSOE su papel en el regreso de Sánchez a la Secretaría General del partido y lamentando no haber podido compartir con la cúpula socialista "una reflexión en beneficio" de sus siglas y "de la restitución del debate público por la senda del sosiego y de la ponderación".

Según ha relatado, desde la detención de quien fuera su colaborador en el Ministerio de Fomento la semana pasada, ha escuchado todas "las voces a su alrededor", la de sus adversarios políticos, la de quienes le "desprecian" porque "desprecian" su "propia humanidad" y le han hecho "condenar" porque "anteponen las cuestiones de poder a las de la Justicia" y también la de quienes "aún" le quieren.

Ha optado por hacer caso a estos últimos, que le pedían que no se rindiera y ha decidido mantener su acta de diputado aunque en el Grupo Mixto. Después ha hecho hincapié en que ya sólo se debe a ellos, a quienes "efectivamente" le "aprecian".

Una comparecencia en la que ha reflexionado sobre el momento político actual explicando que, en su opinión, se ha creado un "ambiente artificioso" para condenarle y por eso no puede rendirse. "No puedo complacer a quienes practican este estilo y estas estrategias soterradas. Tengo que defenderme a todos los niveles, por mí y para evitar que estas estrategias que construye la derecha en la política y en los medios cobren fuerza y se instalen en la sociedad y arrollen ciertas posiciones acomplejadas de la izquierda", se ha justificado.

En este sentido, ha señalado que precisa de la "tribuna pública" que le brinda el Congreso para defender no sólo su honorabilidad sino también a quienes "ven y no aprueban estas reglas que establece la lucha por el poder". "A quienes me dicen, hagas lo que hagas, vamos a estar contigo. Yo, a estas alturas, solo me debo a ellos, solo me debo a esta gente", ha concluido.