Stiff Sullivan, el director que hace temblar TikTok con 'películas' de terror de un minuto

Stiff Sullivan, el director que hace temblar TikTok con 'películas' de terror de un minuto

Entrevista con Carlos Iglesias, director de cine enmarcado en el terror, un género que envejece "rápido y el que peor parado sale".

Stiff Sullivan ('Monstruos') habla con El HuffPost sobre su vida y proyectos.Stiff Sullivan.

En las redes sociales le conocen como Stiff Sullivan. Pero detrás está Carlos Iglesias, un entusiasta e innovador director de cine de terror de 28 años que busca dar el gran paso en un mundo en el que es muy complicado adentrarse.

Cuando nadie te recuerde, Roto, ¿Y ahora qué?, La Noche De La Bruja, TIC TOC, Nunca Más, Off y Otribius: Génesis son algunas de sus obras que le han llevado a ganar premios, entre los que se encuentra galardones del festival de la talla de El Festival de Cine de Sitges. 

Su última gran apuesta está en las redes sociales de TikTok e Instagram bajo el nombre Hago una película de terror con desconocidos en el que se acerca a la gente de la calle y, a partir de un objeto y un sentimiento, crea una película de terror de tan solo un minuto que lo han catapultado hasta los más de dos millones de seguidores.

  Stiff Sullivan.Instagram: @stiffsullivan

- Todos le conocen como Stiff Sullivan, pero su nombre real es Carlos Iglesias. ¿Por qué ha elegido ese nombre artístico?

Hay dos explicaciones. La primera es que cuando yo decidí entrar en el mundo del cine de una manera más amateur, ya había un Carlos Iglesias. Por entonces mis amigos me llamaban Steve por un personaje de una película que no voy a mencionar para que no se especule, pero recuerdo que en Tuenti me llama Steve Iglesias. Cuando me abrí un canal de YouTube, que era supercutre, quise buscar un nombre con un apellido acorde. Se apellidaba Sullivan, un batería que murió que me gustaba mucho y pensé que como 'Stiff' no estaba registrado, sería ese. Llevo 15 años con ese seudónimo.

- ¿Cuándo fue ese momento en el que decidió apostar por el cine?

Tengo el recuerdo de ir al pediatra con mi madre en el que me hacían la típica pregunta sobre qué quieres ser de mayor, siempre respondía que quería ser director de cine, aunque era muy pequeño y no entendía bien qué significaba serlo. Me gustaba mucho el cine.

- ¿Qué significa el cine para usted? Para cada uno es algo diferente y único.

Tal y como he crecido y he formado mi personalidad, hacia dónde quiero enfocar mi vida... El cine solo es el oxígeno que puedo respirar. Si a mí me quitas esto, no sé lo que soy, me quedo vacío.

- Se centra en el terror. ¿Por qué no otro género?

Entendiendo los problemas que puede dar el género de terror, que es el que más rápido envejece y el que peor parado sale a lo largo de los años... Me mueve las tripas. Es el género que más cosas me hace sentir, tanto consumidor como creador. Me hace sentir vivo, despierta sensaciones en mí mucho más divertidas. No obstante, me encanta todo el cine, me apasiona, no me cierro a tratar otros géneros. El terror es algo innato en mí, me siento muy atraído por los crímenes, las desapariciones, los asesinatos...

- ¿Qué debe tener para usted una buena película de terror?

Lo que más me llama la atención es cuando una película tiene unos elementos concretos para que cuando acabes de ver la película tengas que trabajar, llevártela a tu casa y tengas muchas cosas que procesar. También disfruto de las que vas, te entretienes, te vas a casa y a otra cosa. La película de terror que yo más disfruto es la que, cuando acaba, propone un reto al espectador y tienes que trabajar el cerebro. Y aunque lo hayas entendido todo, que te vayas a casa con una sensación de supervivencia en el que el cuerpo tenga algo que procesar. Suelen ser películas de un terror más psicológico, sobre todo son los temas relacionados con la familia. No tendrían por qué ser sobrenaturales al 100%.

- Hay un apocalipsis, desaparece el género de terror, pero sobreviven tres películas. ¿Cuáles lo hacen?

Psicosis, El exorcista y El Resplandor.

- ¿Por qué?

El Exorcista es probablemente la película más terrorífica que jamás se ha hecho. Es muy difícil que algo así se vuelva a repetir. En el caso de El Resplandor... es algo muy difícil de explicar, es insano. Mientras la estás viendo tienes la sensación que no deberías hacerlo. Trabaja con encanto con la luminosidad, con no parecer una película de terror al uso, lo que transmite... Consigue crear una atmósfera muy desagradable, inquietante, incómoda, a mí me fascina.

Psicosis es una película con mucha historia, tanto en la producción como lo que hubo detrás, es el amor que hay que tener por el cine como lo que trabajó Hitchcock para sacarla hacia adelante. Tiene una cosa muy importante: en el momento en el que sale, en ese tiempo, todo el mundo pensaba que no debía estrenarse porque era una película que la gente no tenía que ver. Es el reto que hay siempre en el terror: hasta dónde estás dispuesto a llegar, la línea que no debes cruzar.

- ¿Cómo de importante es el sonido y la música en una película de terror? ¿Se puede asustar sin sonido?

Tal y como conocemos el terror a día de hoy, el día es un 50%. Tú puedes conseguir que una imagen de una persona sentada en un sillón sea inquietante solo por estar escuchando una rugosidad indescriptible de tensión, de carga. Si le quitas eso, a lo mejor simplemente es un tío sentado en un sillón. El sonido y la música es lo que le hace creer al espectador que hay algo que o bien tú no sabes y va a suceder, o bien el personaje no sabe y tú tendrías que saber que ha pasado algo. Esa tensión es muy importante, la diferencia de un señor sentado en un sillón, de algo que ha sucedido y no sabes, lo hace la música.

El Exorcista es la película más terrorífica que se ha hecho
Stiff Sullivan, para El HuffPost

- ¿Los videojuegos pueden causar efectos como la violencia o provocar enfermedades mentales?

Creo que generarlo de cero, no. Pero sí lo puede alimentar. Esto lo hablo con una osadía terrible porque no soy psiquiatra ni tengo la formación necesaria para siquiera opinar sobre este tema, pero las cosas que he leído y escuchado... Hace no mucho estuve en una conferencia con un psiquiatra especializado en cine de terror y comentó que una película, al igual que un videojuego, no va a crear a un psicópata, pero sí puede hacer que alguien que ya esté predispuesto a padecer esos problemas los despierte.

- Crean una obsesión.

Es posible. Yo he vivido muy obsesionado con una película. Incluso hubo un caso muy famoso en el que creo que fueron dos jóvenes que mataron a su familia y a unos amigos. Ellos dijeron que era por la película de Scream. Le echaron la culpa al director, que el cine de terror debía estar más controlado porque creaba asesinos en serio. Pero justamente esa película tiene una frase que dice: "Las películas de terror no crean asesinos, solo los hace más creativos".

- Su proyecto más reciente y que está triunfando en las redes sociales es la de Hago una película de terror con desconocidos. ¿Cómo surgió la idea?

Para redes sociales traté de hacer cortometrajes de terror o suspense, siempre por el lado del misterio. Empecé con 30 segundos, pero no me da tiempo a hacer nada, así que empecé a hacer de un minuto. Veía que las redes sociales funcionaban mucho con la interacción de los seguidores y dije que yo lo haría. Y pensé... Voy a crear una serie que sea como un tipo de reto donde gente que yo me encuentre y me digan un objeto y un sentimiento. Y basándose en lo que me digan yo tengo que construir una historia de terror. Y era interesante porque, claro, a la gente lo que le enganchaba evidentemente es la historia en sí, pero es el hecho de que alguien me diga palabras clave para que con base en eso yo tenga que construir una historia y hasta el día de hoy ha sido lo que más me ha catapultado a nivel de cifras.

- 1,6 millones de seguidores y más de 31 millones de ‘me gusta’. ¿La gente está aceptando ver películas cada vez más cortas y en plataformas como TikTok?

Eso es un sacrilegio. Yo sé que hay gente que va a TikTok a ver películas largas, pero eso de ir a ver una película de dos horas y media en TikTok que me explica una voz de Inteligencia Artificial... Eso es terrible. Tú ve a TikTok a consumir contenido creado para la plataforma. Me parece genial que la gente vaya a informarse a redes sociales siempre que tengan una validez lógica en la que basarse. Está mal ver películas en una red social que en compendio total van a ser cinco minutos de tu vida donde te van a explicar la película entera. Primero, te estás cargando la obra, no tienes derecho a consumir ese producto ahí, porque es algo hecho con mucho trabajo y esa película tiene que estar en un formato físico, en una plataforma de streaming en el cine. Y, además, así el cine pierde sentido.

Actualmente, estamos en la generación que menos capacidad tiene para retener la atención. Hace unos años estaba en ocho segundos, ahora en seis. Con estas cosas va a ir a menos, no va a querer ver películas de más duración. Lo siento por decirlo así, pero la gente va a perder inteligencia.

- ¿Cómo reaccionaste ante el ‘boom’ de reproducciones en tus redes sociales?

Trato de ser cauto siempre. Ni me alegro demasiado ni me pongo demasiado triste cuando no funciona. Es inevitable que sienta algo de síndrome del impostor y que en cierta medida sienta que lo que tengo es por suerte. Sé que es un problema, pero intento mucho controlar siempre las expectativas de cómo puede funcionar una cosa. No puedo evitar creer que no lo merezco.

- Haces muchos giros de guion, como en La chica del paraguas rojo.

Justo, se conocen en el funeral de su madre y entiende que la única forma de volver a verla es matar a su padre para ver si vuelve a verla.

- ¿Y un buen giro de guion es...?

Cuando haces cine, un corto, haces un pacto con el espectador para decirle que le vas a venir. El cine es una gran mentira maravillosa, pero el cine de terror y suspense más, porque casi siempre le estás diciendo al espectador que le vas a mentir. Te voy a mentir y tú tienes que descubrir en qué te miento. No hay una clave concreta para hacer un giro argumental: es importante no ser tramposo. Hay que crear una conexión entre el espectador y el protagonista, sea bueno o malo. El truco como tal está en que según construyas la historia, digas, vale, estoy andando por un camino donde parece que vamos hacia este lado y luego no... Debe ser un camino válido para las dos opciones, a partir de la cual puedes construir un buen giro, en el que no hayas considerado que el espectador es estúpido.

- ¿Tienes más presión con tu trabajo? El público no deja de pedir y querer las cosas casi al instante, es muy poco paciente.

Sí y no. Sí, porque me responsabilizo de a dónde llegan mis vídeos y que tengo que seguir por esa línea, trabajando. Todas las semanas tengo que hacer una nueva historia porque ya he hecho un trato con mis seguidores. No puedo fallar. Tengo algo muy generoso de mi público y es mucho, mucho, mucho apoyo. He conseguido crear con ellos una base muy cálida, incluso les piden a las plataformas que me vaya a hacer películas ahí. No hay presión de mis seguidores, sino de mí mismo.

- ¿Qué es lo más difícil de esta profesión? ¿Es tan difícil triunfar como dicen?

Querer dedicarte a esto es una insensatez, pero una insensatez maravillosa por el simple hecho de que haya gente consiguiéndolo. Es impredecible. Tú puedes hacer películas por tu cuenta y ser director de cine, pero claro, si hablamos de estrenar en salas grandes, de ir a premios grandes, es estar 100% metido dentro de este mundo, algo muy complicado. No hay garantía de éxito: es inestable, caótico, estresante, pero maravilloso. Yo animo al 100% a que la gente que quiera ser director de cine luche por ello, porque si lo consigue, va a ser una de las cosas más valiosas que se va a llevar al haber cumplido una meta tan importante.

- ¿Qué se puede hacer para que la gente tenga más oportunidad de vivir de esto o que talentos desconocidos salgan a la luz?

Lo que tenemos más a mano ahora mismo son las redes sociales. Me han ayudado muchísimo, he conseguido más con ellas en un año que en casi 10 años haciendo cortos por mi cuenta. Hay una ventana que antes no había para darte a conocer a la gente.

- Siempre hago esta última y sencilla pregunta, pero que es importante preguntar. ¿Cómo está?

Camino en una fina línea entre el caos y la estabilidad. Estoy estando, ni para un lado ni para otro.