El cantante Raphael celebró este sábado en el Wizink Center de Madrid su concierto más multitudinario desde que comenzó la pandemia de coronavirus, reuniendo a 5.000 personas, el 30% del aforo del recinto (17.000 personas).
Espectadores que entraron después de que se les tomara la temperatura, se les diera una mascarilla y que ocuparon asientos separados con la distancia de seguridad obligatoria.
Aun así, las imágenes que dejó el concierto, y que han sido compartidas por la propia cuenta del Wizink Center en Twitter, han provocado una intensa polémica en las redes, donde muchos no entienden que se celebre un evento así, tan multitudinario, mientras se plantean restricciones más severas respecto a las Navidades.