El arma letal mejorada de Corea del Norte cambia el tablero de la guerra
Los coreanos han entregado desde personal hasta armamento a los rusos, que han aprovechado para probar en el campo de batalla.
La alianza entre Corea del Norte y Rusia ha ido afianzándose con el trascurso del tiempo, convirtiéndose prácticamente en una pieza clave en el conflicto entre Rusia y Ucrania. Los coreanos han entregado desde personal hasta armamento a los rusos, que han aprovechado para probar en el campo de batalla.
Una de las aportaciones clave del país liderado por Kim Jong Un han sido los misiles balísticos, cuya precisión ha supuesto todo un reto para los sistemas de defensa aéreos ucranianos. Una de las cuestiones que sus vecinos los de Corea del Sur han lamentado es que esto pueda ayudar a Corea del Norte a practicar con su armamento para más tarde aplicar lo aprendido contra ellos.
Según analistas, los misiles KN-23 de Corea del Norte pueden alcanzar objetivos hasta 800 kilómetros. Estos misiles, que han sido lanzados en múltiples ocasiones en las últimas semanas, han superado las ya agotadas defensas de Ucrania, dejando el campo libre para que otros proyectiles lleguen a sus objetivos.
A pesar de que Rusia no ha reconocido públicamente su uso de estos misiles, las mejoras en su precisión son evidentes.Se estima que la desviación de los misiles se ha reducido de 1-3 kilómetros a solo 50-100 metros, lo que eleva la efectividad de estos ataques. Se sospecha que Rusia está compartiendo tecnología con Pyongyang, lo que podría haber contribuido a este avance.
Además de los misiles, se ha informado que Corea del Norte ha desplegado tropas en la región rusa de Kursk. Aunque el número de soldados norcoreanos involucrados en combates ha sido significativo, se han reportado grandes bajas. El presidente ucraniano Volodymyr Zelensky ha señalado que Pyongyang podría enviar más soldados a la zona, aunque la inteligencia surcoreana indica que las tropas norcoreanas han detenido sus operaciones en enero.
