Según una prueba elaborada por las nuevas radios digitales de las Fuerzas Armadas Alemanas, estas necesitan casi una hora para poder enviar un mensaje de chat, lo que les hace perder bastante tiempo y dificulta las comunicaciones.
Lo ha confirmado durante un encuentro celebrado este viernes entre ambos mandatarios, donde han hablado, entre otras cuestiones, de las negociaciones para la paz en Ucrania.
Estas condiciones habrían sido clave también en los recientes avances rusos cerca de Velykomykhailivka, donde unidades pequeñas aprovecharon la baja visibilidad para capturar Hai y otras posiciones cercanas.
"Están estudiando su experiencia para expandir la producción en su propio territorio", ha señalado el subdirector de la agencia de inteligencia militar de Ucrania (HUR).
En el supuesto de no hacerlo, amenaza con retirarle su apoyo, según recoge el Washington Post. Mientras tanto, el conflicto de Ucrania avanza y va camino de cumplir los cuatro años.
El Ejército de Israel ha defendido el ataque alegando que de forma previa "varios terroristas abrieron fuego" en una zona donde trabajan los soldados israelíes. Al menos tres de los fallecidos eran niños.
Aunque Rusia no publica datos sobre su industria militar —operativa las 24 horas desde el inicio de la invasión—, estas cifras apuntan a un notable incremento de capacidad.
Se trata de un "muro antidrones" de cerca de 3.000 kilómetros. La medida llega a raíz de la violación del espacio aéreo polaco por parte de Rusia ocurrida el pasado mes de septiembre, así como de otros episodios similares que se han sucedido.
Algunas de ellas son la producción de armamento o la movilización de tropas, dos puntos que debería, según el documento, abordar el continente si quiere prepararse ante un posible conflicto.
Está diseñado para transportar cargas nucleares o convencionales y operar a gran profundidad bajo el agua, lo que le permitiría atacar objetivos costeros o estratégicos desde el mar.
El mensaje fue transmitido a través de la ministra de Asuntos Exteriores norcoreana, Choe Son-hui, quien visitó Moscú y fue recibida por Putin en el Kremlin.